ACERCANDOME AL REY

En aquel día mirará el hombre a su Hacedor, y sus ojos contemplarán al Santo de Israel. Y no mirará a los altares que hicieron sus manos, ni mirará a lo que hicieron sus dedos, ni a los símbolos de Asera, ni a las imágenes del sol. ISAIAS 17-7 Y 8.-

Hoy es un gran día, debes salir a la calle y tratar de ver el rostro de Jesús, puedes verlo en un niño de la calle, en el mendigo hambriento, en una mujer maltratada, puedes ver al Rey en una madre que ha perdido a un hijo, en el rostro de la Viuda, en el enfermo terminar, si buscas el rostro de Jesús, lo podrás ver en el transcurrir del día, en la mirada de un anciano abandonado, pero trata de que cuando encuentres el rostro de Jesús en cada uno de ellos(as), te encuentres con una mirada alegre por que le has dado tu mano amiga y de consuelo, no permitas que la prisa del día, no te deje ver el rostro de Jesús, a veces vale mucho una sonrisa y un pedazo de pan, cuando se tiene hambre, un apretón de mano, cuando se está en tristeza y soledad, recuerda que Jesús dijo, todo lo que hagas a estos uno de mis pequeños me lo haces a mí, no dejes pasar la oportunidad de ser generoso, déjate llevar por el placer y la fragancia que se queda en tus brazos, cuando sostienes al caído, déjate contagiar por la sonrisa de un niño y un anciano, a quienes protegiste del maltrato y les mostraste que vale la pena estar aquí, deja que la vida te dé, la oportunidad de ver el hermoso rostro de Jesús en el rostro de tu prójimo.

Mí amado Jesús, hoy solo deseo poder ver tu rostro, en cada uno de mi prójimo, déjame sentirte cerca de mi ayudando a otros, permite mi señor que través de esos rostros pueda llegar a ti y de ese modo tenga un espacio especial al lado de mi Jehová a través de ti, para ser merecedora (or) de tu gracia y tu misericordia, Amen.-