martes, 31 de enero de 2023

¿Qué Pide Dios De Ti?

 


¿Qué Pide Dios De Ti?

Qué pides tú de tus hijos?  Siempre deseas lo mejor para ellos.

Y has reflexionado en lo que pide Dios de ti?

Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Dios de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios. Miqueas 6:8.

Hay muchos pedidos de Dios en la Biblia para todos aquellos que hemos decidido seguir Sus mandatos. Tales como Buscarlo, amarlo con todo el corazón, perdonar al ofensor, hablar la verdad, amar al prójimo, no buscar el propio bien sino el del otro, hablar verdad, etc.

Pero todos estos, y muchos más los podemos resumir en estos Tres:  Hacer Justicia, Amar Misericordia y Humillarte ante El.

Analicemos estas tres cosas Que Dios pide de ti:

HACER JUSTICIA

Pero no la nuestra, sino lo que es de Dios por medio de la fe en Jesucristo.

Todas nuestras justicias son como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento. Isaías 64:6.

Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. Mateo 6:1.

Hacer justicia y juicio es a Jehová Más agradable que sacrificio. Proverbios 21:3. Y tendremos justicia cuando cuidemos de poner por obra todos estos mandamientos delante de Jehová nuestro Dios, como él nos ha mandado. Deuteronomio 6:25.

Compadecerse de los sufrimientos y miserias ajenas.  

AMAR MISERICORDIA.  

Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.

El impío toma prestado, y no paga; Mas el justo tiene misericordia, y da. Salmos 37:21.

El hombre de bien tiene misericordia, y presta; Gobierna sus asuntos con juicio,

Salmos 112:5.

y que hago misericordia a millares, a los que me aman y guardan mis mandamientos. Deuteronomio 5:10.

Dios, tardo para la ira y grande en misericordia, que perdona la iniquidad y la rebelión, aunque de ningún modo tendrá por inocente al culpable; que visita la maldad de los padres sobre los hijos hasta los terceros y hasta los cuartos. N’umeros 14:18.

La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron.

Salmos 85:10.

Pero un samaritano, que iba de camino, vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia; Lucas 10:33.

HUMILLARNOS ANTE DIOS.

Una actitud de humildad.  Andar humildemente con tu Dios.

HUMILDAD,  es la ausencia de soberbia. Es una característica propia de los sujetos modestos, que no se sienten más importantes o mejores.

Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. Proverbios 22:4.

Al humillarnos ante Dios, estamos reconociendo que sin El nada somos, nada tenemos y nada podemos hacer.

Alva Vargas De Contreras.

lunes, 30 de enero de 2023

Esfuérzate y sé valiente

Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas. (Josué 1:9) 

Josué 1:9 RVC

Escucha lo que te mando: Esfuérzate y sé valiente. No temas ni desmayes, que yo soy el Señor tu Dios, y estaré contigo por dondequiera que vayas.»

Hay momentos en los que necesitamos tomar una decisión importante o dar un paso de fe y leemos el versículo de Josué 1:9 en busca de ánimo y fortaleza. Ahí encontramos la promesa de que Dios acompañaría a Josué dondequiera que fuera y nos gusta reclamar esa promesa como nuestra. La historia detrás del versículo manifiesta la fidelidad y bondad de Dios hacia Josué y hacia su pueblo. Ahora bien, ¿Quién fue Josué y bajo qué circunstancias recibió esa promesa?

Dios escoge algunas personas desde jóvenes para realizar un trabajo en específico y Josué es un ejemplo. Él nació en Egipto bajo la esclavitud y opresión del Faraón. En Éxodo 17 se le menciona por primera vez cuando Moisés lo designó como líder de un grupo que iría a combatir a los amalecitas en Refidín. Esa es la primera de varias victorias que Josué experimentaría durante su vida. Josué no lo sabía aun, pero un día él sería el sucesor de Moisés dirigiendo al pueblo.

En su juventud Josué fue asistente de Moisés; hacía guardia frente a la Tienda de reunión donde Dios hablaba cara a cara con Moisés y le daba instrucciones para el pueblo. Josué tomaba muy en serio su trabajo y se destacaba por su dedicación.

Y hablaba el Señor con Moisés cara a cara, como quien habla con un amigo. Después de eso, Moisés regresaba al campamento; pero Josué, su joven asistente, nunca se apartaba de la Tienda de reunión.
(Éxodo 33:11)

El verdadero nombre de Josué era Oseas, pero Moisés se lo cambió por Josué que significa "Jehová es salvación". Él fue uno de los doce espías que Moisés envió a explorar Canaán, la tierra que Dios había prometido dar a los israelitas. Caleb y Josué fueron los únicos en dar un informe positivo y lleno de fe animando al pueblo a obedecer a Dios y a ir a conquistar la tierra de Canaán. Gracias a su confianza en las promesas de Dios se les permitió entrar a la Tierra prometida (Números 14:30).

Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas.
(Josué 1:9)

Sucesor de Moisés

Cuando Dios avisó a Moisés que se acercaba su muerte, Moisés pidió un nuevo líder para el pueblo (Números 27:17). Dios nombró a Josué porque era un hombre de gran espíritu, o dicho en otras palabras, era un hombre en quien moraba el Espíritu de Dios (Números 27:18). Moisés lo comisionó como su sucesor antes de morir y el pueblo reconoció de inmediato que su liderazgo provenía de Dios.

Entonces Josué hijo de Nun fue lleno del espíritu de sabiduría, porque Moisés puso sus manos sobre él. Los israelitas, por su parte, obedecieron a Josué e hicieron lo que el Señor le había ordenado a Moisés.
(Deuteronomio 34:9)

Promesas y cómo las recibiría

En Josué 1:1-9 Dios le habla directamente a Josué. Le dice que aunque Moisés había muerto, su plan para el pueblo continuaba vigente y se cumpliría bajo el liderato de Josué. ¡Entrarían en la Tierra prometida! ¡Dios les daría todo lugar que pisaran sus pies! En estos versículos Dios también confirma su llamado a Josué y le hace unas promesas. Veamos estas promesas y cómo las obtendría.

1. Victoria

Durante todos los días de tu vida, nadie será capaz de enfrentarse a ti. Así como estuve con Moisés, también estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré.
(Josué 1:5)

Nadie sería capaz de enfrentarse y vencer a Josué porque Dios estaría con él de la misma forma en que había estado durante la vida y el liderazgo de Moisés. No triunfaría por sus propias fuerzas; el poder de Dios y su presencia le llevarían a la victoria. Solo necesitaba confiar sin importar cuán grande o poderoso pareciera el enemigo. ¡Él sabía que Dios es más grande y poderoso que cualquier enemigo!

2. La herencia

Sé fuerte y valiente, porque tú harás que este pueblo herede la tierra que les prometí a sus antepasados.  (Josué 1:6)

Sé fuerte y valiente, porque tú harás que este pueblo herede la tierra que les prometí a sus antepasados.
(Josué 1:6)

Dios cumpliría la promesa que había hecho a Abraham y a los antepasados de ellos: heredarían la tierra de Canaán. Sus ojos y su fe no debían estar puestos en la fuerza física que podían o no tener Josué, el pueblo o sus enemigos. Sus ojos debían estar fijos en Dios y en la fuerza que él les concedería hasta ver el cumplimiento de la promesa.

3. Éxito

Solo te pido que tengas mucho valor y firmeza para obedecer toda la ley que mi siervo Moisés te ordenó. No te apartes de ella para nada; solo así tendrás éxito dondequiera que vayas.
(Josué 1:7)

El éxito llegaría y estaba asegurado, pero requeriría obediencia. Bajo Moisés, y a través de su historia como pueblo de Dios, habían aprendido la importancia de obedecer la ley. Las bendiciones y las victorias llegan a medida que expresamos nuestra confianza en Dios obedeciendo sus mandatos.

4. Prosperidad

Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito. (Josué 1:8)

Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.
(Josué 1:8)

Josué vería la prosperidad y el éxito, ganaría batallas y conquistaría la tierra de Canaán junto al pueblo. La estrategia para lograrlo no era conseguir mejores armas o entrenarles mejor como soldados. Como líder, necesitaba tener la palabra de Dios en su boca y en su corazón. Debía recitarla de día y de noche, meditar en ella, hablar de ella y cumplir todas las instrucciones que estaban allí escritas. Así prosperaría y obtendría el éxito.

5. Su compañía

Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas.
(Josué 1:9)

La orden de ser valiente y de no tener miedo venía con la mejor promesa que podía recibir: contaría con la compañía de Dios. No estaría solo, Dios estaría con Josué en dondequiera que él fuera. Gracias a esa presencia de Dios triunfaría sobre el temor y se mantendría firme, confiado en la victoria que ya era suya.

La frase sé fuerte y valiente

¿Por qué se repiten tanto las frases de ánimo hacia Josué? Vemos que cuando Dios le dijo a Moisés en Deuteronomio 1:38 que Josué sería su sucesor y que guiaría al pueblo hasta Canaán también le dijo que Josué necesitaba ser animado.

Quien sí entrará es tu asistente, Josué hijo de Nun. Infúndele ánimo, pues él hará que Israel posea la tierra.
(Deuteronomio 1:38)

Vemos esto nuevamente en Deuteronomio 31:7 y 8 cuando Moisés lo comisiona como su sucesor, y luego en el versículo 23 del mismo capítulo cuando Dios le dice a Josué:

Esfuérzate y sé valiente, porque tú conducirás a los israelitas al territorio que juré darles, y yo mismo estaré contigo.
(Deuteronomio 31:23)

No sabemos con certeza por qué Josué necesitaba esas frases de ánimo. ¿Se comparaba con Moisés y pensaba que no daba la talla? ¿Veía que los obstáculos a enfrentar como líder eran demasiado grandes? No lo sabemos. Pero sí sabemos que él lo hizo: fue muy valiente y se esforzó en su labor. Él confió en Dios de todo corazón, obedeció los mandatos de la ley y logró disfrutar de la compañía y bendición de Dios hasta entrar con el pueblo a la Tierra prometida y durante el resto de su vida.

De la misma forma nosotros podemos estar seguros de que recibiremos las promesas que Dios nos ha dado. Cuando obedecemos a Dios y vivimos de una forma que le glorifica, vemos cómo él cumple sus promesas y disfrutamos de sus bendiciones. Al igual que Josué, ganaremos las batallas que nos presente la vida tomados de la mano de nuestro Dios. Él siempre cumple sus promesas, y junto a él podemos tener ánimo y ser valientes.

BLOG SUBIBLIA

domingo, 29 de enero de 2023

Regalo u ofrenda

 


Regalo u ofrenda

Recibimos regalos en nuestro cumpleaños, navidad, u otras ocasiones especiales.

En término de Dios, una diferencia es un regalo y otra es una ofrenda.

No estoy hablando de ofrenda en términos monetarios, ya que eso sería muy estrecho.

El regalo de Dios

Dios nos dio un regalo inmenso al darnos a su hijo pero también fue una maravillosa ofrenda, porque se desprendió  de su hijo Jesucristo y una ofrenda es un sacrificio.

La vida es un regalo y necesitamos devolver la vida a quien nos dio ese regalo como una ofrenda.

Cuando una persona ofrece su vida como ofrenda a Dios, entra en una nueva dimensión.

sábado, 28 de enero de 2023

 


Salmo 91:10: No te sobrevendrá mal ni plaga tocará tu morada

El Ébola, se considera como uno de los virus más mortíferos y endémicos o mejor dicho altamente contagioso. Hasta ayer pensábamos que algunas enfermedades “mortales” eran la preocupación de muchos, pero si nos ponemos a pensar que dentro de su mortalidad, hay tratamientos seguros para sanar o prolongar la vida del ser humano.

¿Qué es el Ébola, y cuáles son sus síntomas?
El virus del Ébola es esencialmente el causante de la fiebre hemorrágica viral del Ébola, una enfermedad infecciosa, altamente contagiosa y mortal. El virus se transmite por contacto directo con fluidos corporales infectados como la sangre, la saliva, el sudor, la orina o los vómitos. El período de incubación varía de 2 a 21 días, aunque lo más normal es de 5 a 12 días.

     ¿Cuáles son los síntomas? Afecta a múltiples órganos y sistemas en el cuerpo y con frecuencia se acompañan de sangrado. Fiebre alta, postración, mialgia, dolor muscular severo, artralgias, dolores de cabeza, dolor de garganta, dolor abdominal y cefalea. En un lapso de una semana, aparece en todo el cuerpo una erupción hemorrágica.

   ¿Dónde se originó? El nombre proviene del rio Ébola, en la República Democrática del Congo, antiguo Zaire donde fue identificado por primera vez en el año 1976 durante una epidemia.

    ¿Tiene cura?  El virus del Ébola como todos los virus “calientes”, no tienen cura y ningún tratamiento específico. Tiene una tasa de mortalidad del 90% (Fuente: CNN).

   “Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores” (Mateo 24:6-8).

    “El que habita al Abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y Castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. Él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es Su Verdad. No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya. Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará.

 Ciertamente con tus ojos mirarás y verás la recompensa de los impíos. Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación, no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra. Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón. Por cuanto en Mí ha puesto su amor, Yo también lo libraré; Le pondré en alto, por cuanto ha conocido Mi Nombre. Me invocará, y Yo le responderé; con él estaré Yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, y le mostraré Mi Salvación” (Salmos 91).

      Oremos:
Jehová de los Ejércitos, Tú te muestra en el Salmo 91 como el Dios Todopoderoso, como el Dios Altísimo y Excelso, el que Todo lo puede y no hay nada difícil e imposible para Ti. Padre Celestial ten misericordia de nosotros y perdónanos. Señor declaro Salmos 91 a todos los hogares de Tus Hijos. Señor creo en tu Palabra y declaro que no temo al terror nocturno, ni a saeta que vuele de día, ni a pestilencia que ande en oscuridad, ni a mortandad que en medio del día destruya. Padre Celestial, Tú no me ha dado espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Declaro que mi familia está cubierta bajo Tu Abrigo. Señor, Tu Abrigo me cubre y me libra del peligro, por tanto no me sobrevendrá mal, ni plaga tocará mi morada. Declaro que el enemigo no prevalecerá contra tus hijos. Señor, Tú eres mi Esperanza y mi Señor. Señor Jesús, Tú eres la Vid y yo soy Tu rama por tanto, yo estoy conectada contigo. Por tu misericordia, yo habito en Tu Abrigo, por tanto estoy cubierta bajo Tu protección. Amén.

Por B. Flores
www.ministeriosdesanidad.org

viernes, 27 de enero de 2023

Muerte, desafío y cambio. Parte 3

 

Muerte, desafío y cambio. Parte 3

Estamos viendo que luego de que algo en la vida muere, entramos en un desafío y luego en un cambio,

Fuimos hechos para cambiar y todo en el universo está en pleno cambio.

Si no nos atrevemos a cambiar entonces nos estancamos.

Transformados.

El Apóstol Pablo En Romanos 12;1 y 2 dice: ” Presentemonos a Dios, No nos amoldemos a esta sociedad, sino trtansformaos por medio de la renovación de nuestro entendimiento”

Dios hace nuevas todas la cosas. Y espera que sus hijos amemos el cambio que viene luego de un desafío.

Con amor de tu hermano y amigo

Serafín Contreras Galeano

jueves, 26 de enero de 2023

HUMILLADOS ANTE EL SEÑOR EN ORACION

 


HUMILLADOS ANTE EL SEÑOR EN ORACION

2 Crónicas 7:14-22 RVR1960

si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra

Podemos aprender con este versículo una verdad general. Nuestra actitud en medio de la dificultad debe ser una de humildad ante Dios. Al llegar las pruebas debemos ir delante de nuestro Padre en oración para buscar su rostro y permitirle que nos muestre si hay alguna conducta que necesitamos abandonar.

Ahora bien, todo versículo tiene un contexto específico. Veamos brevemente las circunstancias bajo las cuales Dios hizo esa promesa al pueblo de Israel. 2 Crónicas 7 habla sobre la maravillosa fiesta de dedicación del templo. El pueblo de Israel llegó desde diferentes regiones, Salomón ofreció a Dios un sacrificio sobreabundante y ¡la gloria de Dios llenó el lugar!

Cuando Salomón terminó de orar, descendió fuego del cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria del Señor llenó el templo. Tan lleno de su gloria estaba el templo que los sacerdotes no podían entrar en él.
-- 2 Crónicas 7:1-2

La fiesta duró varios días después de los cuales todos regresaron a sus casas. Una noche, el Señor se le apareció a Salomón y le dijo:

He escuchado tu oración, y he escogido este templo para que en él se me ofrezcan sacrificios. Cuando yo cierre los cielos para que no llueva, o le ordene a la langosta que devore la tierra, o envíe pestes sobre mi pueblo, si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra. Mantendré abiertos mis ojos, y atentos mis oídos a las oraciones que se eleven en este lugar. Desde ahora y para siempre escojo y consagro este templo para habitar en él. Mis ojos y mi corazón siempre estarán allí.
-- 2 Crónicas 7:12-16 (énfasis añadido)

Dios le habló a Salomón sobre la importancia de que todo el pueblo se acercara y se aferrara a él en los momentos difíciles. Vendrían tiempos fuertes, algunos de ellos como consecuencia de la desobediencia del pueblo. Sin embargo, Dios les indicó de antemano lo que debían hacer en esos momentos: debían humillarse unidos como pueblo, orar, buscar a Dios y abandonar su mala conducta. Esas oraciones las debían elevar desde el templo que acababan de dedicar. Si hacían esto, Dios los escucharía, los perdonaría y restauraría su tierra.

2 Crónicas 7:14 en otras versiones

Si se humillare mi pueblo, sobre los cuales ni nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
(Versión Reina Valera Antigua)... y se humilla Mi pueblo sobre el cual es invocado Mi nombre, y oran, buscan Mi rostro y se vuelven de sus malos caminos, entonces Yo oiré desde los cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra.

(Nueva Biblia de las Américas)

miércoles, 25 de enero de 2023

Muerte, desafío y cambio. Parte 2

 


Muerte, desafío y cambio. Parte 2

Luego de experimentar la muerte de algo, alguien o pasar por una crisis no esperada, no todo se termina, sino que Dios nos presenta un desafío. Josué lo vivió luego de Moisés Murió:

Llegó el momento

“Después de la muerte de Moisés, siervo del Señor, el Señor habló a Josué, hijo de Nun y ayudante de Moisés. Le dijo:  «Mi siervo Moisés ha muerto. Por lo tanto, ha llegado el momento de que guíes a este pueblo, a los israelitas, a cruzar el río Jordán y a entrar en la tierra que les doy.  

Te prometo a ti lo mismo que le prometí a Moisés: “Dondequiera que pongan los pies los israelitas, estarán pisando la tierra que les he dado: desde el desierto del Neguev, al sur, hasta las montañas del Líbano, al norte; desde el río Éufrates, al oriente, hasta el mar Mediterráneo, al occidente, incluida toda la tierra de los hititas”.  Nadie podrá hacerte frente mientras vivas. Pues yo estaré contigo como estuve con Moisés. No te fallaré ni te abandonaré. Josué 1:1-5 NTV

El desafío divino comienza y descansa en Él.

No somos nosotros los que presentamos un desafió, sino Dios, quien nos desafía. A Josué le dijo: Porque ha muerto a Moisés. Moisés representaba una época, ambiente, modelo, estilo de vida. Pero a Josué le dice, “Por Tanto”, tú conducirás a este pueblo a la tierra prometida.

Serafín Contreras Galeano


martes, 24 de enero de 2023

Muerte, Desafío y Cambio. Parte 1

 


Muerte, Desafío y Cambio. Parte 1

La vida es corta y la muerte es segura. Pero no solo hablamos de la muerte física, hay muchos tipos de muertes. Podría mencionar muerte emocional, espiritual, relacional, de sueños, proyectos, momentos, finanzas.

Estamos llamados por Dios a entender que todo en nuestra existencia tiene fecha de expiración a excepción de Dios y su amor. Él Nunca cambia y nunca deja de ser.

Muerte, Desafío Y Cambio.

Muchas veces miramos lo que muere como el acabose de todo, pero en realidad la misma muerte viene tomada de la mano de un desafío y el desafío viene de la mano con el cambio. Estas son tres etapas importantes. En esta primera parte habló en este video de que hacer cuando algo en nuestra vida muere.

“Después de la muerte de Moisés, siervo del Señor, el Señor habló a Josué, hijo de Nun y ayudante de Moisés. Le dijo:  «Mi siervo Moisés ha muerto”. Josué 1:1,2

Cuando Dios le dijo a Josué que Moisés había muerto, no se refería simplemente a la noticia de la muerte, sino a la fecha de expiración de una época, un sistema, una relación, un proceso y las siguientes palabras son de aceptar el reto y el desafío de desarrollar tomado de la mano de Dios, un nuevo método, sistema y la configuración de toda una existencia no solo de Josué sino del pueblo de Israel.

 Serafín Contreras Galeano


lunes, 23 de enero de 2023

RENOVANDO LAS FUERZA EN DIOS

 


RENOVANDO LAS FUERZA EN DIOS

Dios dice en 2 Corintios 1:4-5:

«El cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios. Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así también por el mismo Cristo nuestra consolación» (RVR60).

A veces nuestro ánimo decae y nos sentimos defraudados porque las cosas no van como habíamos imaginado. Hay tiempos difíciles en la vida de toda persona. En estos momentos  podemos caer en desánimos y desesperanzas. Para mí una causa ha sido, sobre todo, cuando dejé mi país de origen ya con cierta edad y me obligó a emprender un nuevo camino en otro país que no se parece en nada al que dejé atrás.

En momentos así estamos vulnerables. Es precisamente cuando el Maligno aprovecha para ganar ventaja sobre la Palabra de Dios, la cual es una fuente de apoyo en la vida de todo cristiano.

Entran las interrogantes que buscan desanimar nuestro espíritu: ¿Quién soy? ¿Qué tengo? ¿Qué me espera? Nuestra fe flaquea y Dios parece insuficiente ante nuestra incertidumbre. Nos envuelve el presagio de que hemos vivido para nada, porque a la edad en que ya vencimos parte de la adultez sentimos que este futuro que ya llegó no era lo que esperábamos en nuestra juventud.

¿Por qué sufres, hijo mío, si tienes la promesa eterna de mi Palabra?:

«Tu palabra, SEÑOR, es eterna, y está firme en los cielos. Tu fidelidad permanece para siempre; estableciste la tierra, y quedó firme».

    — Salmo 119:89–90 (NVI)

Eso nos dice Dios en ese diálogo maravilloso que mantiene con nosotros. Pero no escuchamos su voz a la distancia porque nos sumergimos en el torbellino de las preocupaciones, las necesidades económicas y las carencias de toda índole, sin recordar que Dios mismo nos ha dicho que depositemos nuestra carga en él. Esta manera de pensar nos lleva a la pobreza espiritual que mengua la plenitud que Dios nos ofrece.

Así me he sentido en algunos momentos de mi vida. Mis problemas causaron una batalla en mi mente y mi espíritu que debilitó mi fe y casi extingue, al parecer, hasta el más leve rayo de luz. No comprendemos que hay formas de consolidar nuestra fe que nos anima a caminar en Cristo. Entonces es cuando debemos recordar que hay una fuente inapreciable de sabiduría, de poder, de amor y de bondad, que es la Palabra de Dios. En sus páginas encontramos consuelo, refugio, hasta respuestas, dándonos aliento y fuerza en los instantes de flaqueza.

Somos la vasija con que Dios moldea a fuerza de pruebas nuestro carácter y nos llena de fortaleza en él. Es de suma importancia que acudamos diariamente a la Palabra de Dios, a su lectura cotidiana, pues de dicha fuente emana como una luz la sabiduría y las respuestas a todo agobio. Es esencial que le pidamos todo aquello que requerimos, y que lo hagamos con fe:

«Pidan, y Dios les dará; busquen, y encontrarán; llamen a la puerta, y se les abrirá. Porque el que pide, recibe; y el que busca, encuentra; y al que llama a la puerta, se le abre». 
 — Mateo 7:7-8

Cuando nos enfocamos en la Palabra de Dios, no desviando nuestra atención en las cosas preocupantes, podremos enfrentarlas con la seguridad de que vamos a tener el apoyo incondicional de Dios. Es exactamente como lo dice Filipenses 4:13:

«A todo puedo hacerle frente, gracias a Cristo que me fortalece».

BLOG DE LA BIBLIA

viernes, 20 de enero de 2023

Cuando la ansiedad era grande en mí, tu consuelo alegraba mi alma

Cuando la ansiedad era grande en mí, tu consuelo alegraba mi alma

Salmo 94:19

En la multitud de mis pensamientos dentro de mí,
Tus consolaciones alegraban mi alma

Pensamientos sobre el Verso de Hoy

Dios es nuestro consuelo, sustento y Señor. Solo su presencia llena de gracia y bendiciones pueden consolar nuestras almas cansadas y derrotadas. Por eso debemos buscarlo, y confesar nuestros pecados y tristezas. Pidámosle que alivie nuestra ansiedad y restaure nuestra pasión, gozo y la confianza de nuestra salvación.

Mi oración

Pastor Todopoderoso, en el ruido y confusión de los pensamientos sin fin y mis muchas preocupaciones, bendíceme con tu Espíritu Santo. Necesito tu consuelo y paz. Pido tu presencia y gracia. En el nombre de Jesús, pido. Amén.

Los pensamientos y la Oración del Verso de Hoy son escritos por Phil Ware