domingo, 30 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Piedrecillas

Recuerdo una vez que caminé junto a un riachuelo de Texas hace muchos años con mi cuñado Ed y David, su hijo de tres años. Mientras caminábamos, David había estado recogiendo piedras lisas y redondas de la corriente. Las llamaba “cerditos” porque su forma redonda le hacía pensar en cerditos.

David se metió una serie de “cerditos” en los bolsillos, y cuando se le terminaron los bolsillos, comenzó a llevarlos en los brazos. Después de un rato empezó a tambalearse bajo el peso de las piedras y se quedó atrás. Era evidente que sin nuestra ayuda nunca llegaría a la casa, por lo que Ed dijo: “Ven, David, déjame cargar tus cerditos.”

El rostro de David se cubrió de renuencia por un momento, y luego se iluminó. “Ya sé – dijo — . Tú me cargas a mí y yo cargo a mis cerditos.”

Muchas veces he pensado en ese incidente y en mi propia insistencia infantil en que debo llevar mi propia carga. Jesús ofrece llevar todas mi cargas, pero yo me resisto por terquedad y orgullo. “Tú me cargas a mí – digo — , pero yo cargo mis “cerditos”.

“¡Piénsalo bien, no deberías tratar de llevar todas tus cargas tú solo! cuando Jesús te pide que eches “toda [tu] ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de [ti]” (1 Pedro 5:7).

¿Has puesto hoy TODOS tus “cerditos” en los fuertes brazos de Jesús?

Mateo 11:28
Venid á mí todos los que estáis trabajados y cargados, que yo os haré descansar.
Salmos 55:22
Echa sobre el Señor tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.

sábado, 29 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Lo Invitaré A El Con Alabanza

“En Dios alabaré su palabra; En Dios he confiado; no temeré; lo que puede hacerme el hombre? . Salmo 56:4.

Cuando adoramos al Señor, estamos enfocando nuestra atención y afecto en Él. Estamos agradeciéndole todo lo que ha hecho por nosotros.

Reconocemos Su mano obrando en nuestras vidas, y le estamos diciendo lo contentos que estamos al saber lo que conocemos de Él. Como los buenos amigos recordando todas las alegrías de su amistad de toda la vida, o como una hija meditando en esos momentos especiales cuando su madre la dejó jugar con su joyero por primera vez, el adorar a Dios funciona como un recordatorio revitalizante de que no estamos solos, ni lo hemos estado. Somos conocidos, amados y auxiliados a lo largo de nuestras vidas.

Adoramos al Señor por lo que Él ha hecho y por quién ha sido para nosotros. El traer a la memoria todo lo que ha sido verdad de Su trato para con nosotros en los días y años anteriores crea una increíble anticipación de nuestro futuro.

La alabanza es una declaración poderosa de la verdad respecto a lo que Dios ha hecho en el pasado, y también de cómo ha sido Él. ¿Por qué crees que el recordar Su trato para con nosotros en el pasado aumenta nuestra fe en Su obra futura para nuestro beneficio?

La expresión “ Lo alabaré” es difícil de traducir completamente porque comunica una ilustración completa que no está contenida ni en una sola de las palabras de nuestro idioma.

Piensa en arreglar un hermoso cuarto de huéspedes que es tanto acogedor como refinado; el tipo de lugar del que nadie quisiera salir ni para ir a comer. El cuarto es tan cómodo y atrayente que tus invitados se sienten completamente como en casa. ¿Puedes ver cómo la alabanza le da la bienvenida al Señor? ¿Por qué te gustaría que el Señor fuera un invitado permanente en tu casa?

Gracias Señor, por darme hoy la oportunidad de alabarte y al hacerlo se que te estaré invitando a estar cerca de mi. Gracias por tu Hijo Jesucristo. Amén.

Dr. Daniel A Brown.
Disfrute Tu Diaria Vivir con Dios.

viernes, 28 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Veré el Amor como un Idioma de Adoración

“Mas yo por la abundancia de tu misericordia entraré en tu Casa; adoraré con reverencia hacia tu santo templo”. Salmo 5:7

Cuando amamos a alguien, anhelamos una relación en la cual los dos participan activamente. Aunque el verdadero amor puede darse a distancia y aun sostenerse frente al rechazo total, su urgencia básica es conectarnos con la persona que amamos.

El estar enamorados significa que queremos estar cerca de ellos y con ellos, haciendo cosas y experimentando cosas juntos. El amor consiste en compartir y comunicarse con otra persona al nivel más profundo de nuestro ser.

El amor es como un idioma: transforma los sentimientos en expresiones que pueden ser entendidas por otros. El amor debe expresarse a sí mismo.

Nada es más importante para Dios que Su relación con nosotros.

Desde el comienzo, Él quiso una interacción viva con nosotros, y pagó un precio increíble que restaurara con seguridad una unión duradera entre nosotros y Él. Dios quiere relacionarse con nosotros de forma tan íntima y profunda que lo experimentemos por quién Él verdaderamente es, y nos veamos atraídos a una comunión cada vez más profunda con Él. Una y otra vez Él comunica cuánto nos ama.

Sabiendo cuán satisfactorio es para el amor poder expresarse, Él quiere que nosotros tengamos una forma de declarar nuestro amor por Él, así que nos capacita para participar en una de las actividades más satisfactorias y significativas de toda la creación: la adoración al Dios Altísimo.

Muchas personas erróneamente se imaginan que el adorar es algo que Dios requiere, ya sea porque le guste oír que lo alaban (como una deidad insegura, hambrienta de su ego), o porque perpetuamente vive de mal humor y tenemos que aplacar Su ira con sacrificios verbales (como arrojar a personas a un volcán para apaciguar a un dios de la lluvia).

El corazón de Dios en cuanto a la adoración no tiene nada que ver con lo que Él recibe de nuestra alabanza, como si necesitara algo de nosotros o le diera cierta clase de placer auto-satisfactorio al hacer que nosotros reafirmemos Su lugar preeminente en el universo.

La adoración, como cada aspecto de la verdad que Dios ha proveído para nuestro caminar con Él, tiene un gran propósito: llevarnos a una relación más estrecha con Él. La adoración es el idioma del amor y la comprensión que llegamos a usar con el Señor. Tal como Su amor nos da la bienvenida y nos honra, así nuestra adoración verbaliza nuestro deleite en Él.

▲La adoración es el idioma del amor entre nosotros y el Señor.
▲La adoración es para nuestro bien, no para el del Señor.
▲Podemos adorar en cualquier momento y en cualquier lugar.
▲La adoración es una actividad externa.
▲La adoración nos transforma.
▲La adoración es una fuerza espiritual poderosa.
▲El orgullo evita que las personas adoren a Dios.

Nada es más importante para Dios que Su relación con nosotros.

Gracias Señor, porque hoy puedo conectarme en el Amor a través del idioma de la Adoración. En el Nombre de Jesús, Amén.

Dr. Daniel A. brown.

Disfrute Tu Diario Vivir.

jueves, 27 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Daré La Gloria Al Rey

“Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la ternidad. Amén. “ II Ped 3:18

Hoy amanecí pensando en la atmósfera y el ambiente que se respira en los cielos. Sé por la Palabra de Dios que los cielos están llenos de alabanzas incesantes para Jesús. Las cosas en esta tierra parecen apresurarse y las modas tienden a cada instante a pasar. Lo que ayer era nuevo, hoy ya es viejo, pero hay algo que jamás pasará, nunca se pondrá antigua, y esta es la alabanza y la gloria que como pueblo tributamos al Rey de Reyes y Señores. Jesús es el sacerdote eterno…A él daré la gloria hoy.

Él es el Rey eterno, a él daré la gloria. Él es el Rey de Reyes y el Señor de señores, a él elevaré mi canto de adoración hoy. Nunca las alabanzas al Señor cesarán . Quién nos compró con su sangre merece nuestra alabanza por la eternidad.

La gloria de la cruz nunca se eclipsa; el brillo de la sepultura y de la resurrección jamás se rebaja. Jesús es digno de adoración ahora y siempre. Hoy como creyente, anticipo el tiempo cuando me uniré a los santos arriba en los cielos con los otros redimidos para darle gloria por siempre al que vive para siempre. Las palabras del Apóstol hoy son: A él sea la gloria ahora y hasta el día de la eternidad.

Hoy quiero elevar esa expresión desde mi corazón al trono de mi Rey. “El Señor, me ayuda para hoy para glorificarlo a él. Yo soy pobre, pero el Señor me ayuda para glorificar en la satisfacción que él me da. Si estoy enfermo, me ayuda para darle honor por la paciencia; Si tengo talentos, me ayuda para ensalzarlo a través de ellos.

Si tengo tiempo, el Señor, me ayuda para redimirlo a fin de que pueda servirle dándole gloria. Tengo un corazón para sentir, el Señor me ayuda para que ese corazón vibre de amor por él. Tengo una cabeza para pensar, el Señor me ayuda para que hoy piense en él.

El Señor me puso en este mundo para algo, el Señor, me muestra ese algo y me ayuda para lograr ese propósito para glorificarlo. Soy todo del Señor y él me toma y me permite hoy glorificarlo, en todo lo que digo, en todo lo que hago y con todo lo que tengo.

Gracias Señor, Hoy me concedes la gran oportunidad de glorificarte y no sólo eso, sino que me ayudas para que yo lo pueda hacer con plena y total libertad. Gracias porque puedo poner mi vida ante ti y exaltarte.

Gracias por darme la oportunidad de tener un anticipo aquí en la tierra de lo que haré en la eternidad. Exaltarte y glorificarte desde lo profundo de mi corazón. Amén.

Dr. Serafín Contreras Galeano.

miércoles, 26 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Cómo Reaccionas?

Una hija se quejaba a su padre acerca de su vida, y cómo las cosas le resultaban tan difíciles.

No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida.

Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.

Su padre, un chef de cocina, la llevó al lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre el fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo.

En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra.

La hija esperó pacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre.

A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó sobre un recipiente. Sacó los huevos y los colocó en un plato. Colocó el café y lo sirvió en una taza.

Mirando a su hija le dijo: ¿”Querida qué ves”? “Zanahoria, huevos y café” fue la respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas.

Luego le pidió que tomara el huevo y lo rompiera. Al sacarle la cáscara, observó que el huevo estaba duro.

Luego le pidió que tomara un poco del café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.

Humildemente la hija preguntó: “¿Qué significa esto, Padre?”

El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad:

agua hirviendo, pero que habían reaccionado de manera diferente:

La zanahoria llegó al agua fuerte, dura. Pero después de pasar por el agua hirviéndose había vuelto débil, fácil de deshacer.

El huevo había llegado al agua frágil. Su cáscara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua hirviendo su interior se había endurecido.

Los granos de café, sin embargo, eran únicos. Después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.

¿Cuál eres tú?, le preguntó a su hija.

“Cuando la adversidad llega a tu puerta, ¿Cómo respondes? ¿Cómo eres tú?

¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil, y pierdes tu fortaleza?

¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? ¿Poseías un espíritu fluído, pero después de una muerte, una separación, un divorcio, o un despido te has vuelto duro y rígido?
Por fuera te ves igual, pero ¿Eres amargado y áspero,con un espíritu y un corazón endurecido?

¿O eres un grano de café? El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor.

Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor.

De corazón, te deseo que intentes ser como el grano de café, cuando las cosas no vayan bien y puedas lograr que tu alrededor mejore.

Recuerda todo lo que te sucede en la vida es por alguna razón, sólo necesitas descubrir su motivo y aprender de ello.


Romanos 8:28
Y sabemos que á los que á Dios aman, todas las cosas les ayudan á bien.


Filipenses 4:6-7
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.


Romanos 8:38
Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

martes, 25 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Viviré En La Certeza de lo que se Espera

Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” Hebreos 11:1.

Cuantas veces he mal entendido lo que es realmente la fe. He pensado en la fe como algo que yo mismo produzco por mi esfuerzo, cuando en realidad la Biblia dice que la fe viene de Dios. Es él quien siembra la fe en mi corazón y luego de sembrar esa fe, la circunstancia se presenta como el terreno apropiado para que germine la potencialidad de Dios es todo su esplendor. Necesito entender este principio para vivir en la certeza de lo que se espera.

Si yo tengo un hijo enfermo, yo no se nada de medicina, pero lo que hago es llamar al doctor y poner la vida de mi hijo en las manos de ese Doctor. Cuando lo llevo al Doctor hay en mi una seguridad de que el médico tiene el suficiente conocimiento para manejar ese problema y no voy a interferir en ese trabajo, solo me siento a esperar y tengo la certeza de que sus conocimientos arrojarán luz sobre ese problema. Pues , con mucha más razón debo manejar las cosas espirituales con certeza sabiendo que el Creador tiene toda la sabiduría necesaria para resolver los más grandes conflictos de la vida.

La certeza que viene de la fe que Dios da, viene al entender que Dios realmente es el creador de todo y que nada escapa de su mano. Su poder es sin igual y grande. Hoy debo confiar en Dios en el tiempo de la turbación y de la tempestad. Necesito confiar con él con toda mi alma hasta el último día de mi vida y dejar que la certeza germine hacía lo que se espera. El Señor es el Dios de la esperanza y en él yo esperaré.

Señor. Gracias por ser el Señor de la esperanza. En medio de un mundo lleno de desesperanza hoy quiero descansar plenamente en ti y dejar que la certeza que viene de ti, pueda germinar hacía lo que se espera. Cuán grande es la esperanza que viene de tu mano. Fortaleza y Gracia vienen de ti. Amén.

Dr. Serafín Contreras Galeano.

lunes, 24 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



El Proceso De Recaída

Recaída o un retorno a la adicción o a problemas de comportamiento adictivos es raramente un acontecimiento aislado.

Generalmente, el proceso se ha estado desarrollando durante algún tiempo con señales de peligro que cualquier adicto ha elegido ignorar, o está inconscientemente enterado de él. Esa es la razón por la cual un plan de recaída y un sistema de apoyo para poner en ejecución este plan es tan crucial para la prevención de la recaída.

Aún cuando el plan puede no prevenir la recaída en cada instancia, los adictos, si quieren, pueden aprender lecciones invaluables de su proceso de recaída que afectarán positivamente la recuperación futura.

Un individuo puede estar en recaída bien antes de enganchar al comportamiento adictivo.

Señales de advertencia pueden incluir:

CAMBIOS DE ACTITUD: Cambios negativos de actitud, tales como no cuidar más la recuperación o rendirse, son a menudo señales iniciales de peligro de la recaída.

CAMBIOS EN EL PENSAMIENTO: Rendirse a la recuperación de pensamiento, incluso temporalmente, puede ser peligroso para una persona adicta. Creer que uno está sanado, o curado, o es merecedor de una recompensa, especialmente si está relacionado remotamente con la adicción de uno, puede señalar una caída. Los adictos pueden involucrarse en pensamientos grandiosos muy fácilmente y sujetarse ellos mismos a situaciones peligrosas o de auto-derrota que minan sus habilidades de recuperación recién formadas. El mejor consejo: ¡No vayan allá!.

CAMBIOS EN COMPORTAMIENTO: Volver a viejos lugares asociados con la adicción, estar alrededor de individuos asociados con la adicción, cambiar la asistencia a reuniones de recuperación o parar la terapia sin justificación sólida, un aumento en los síntomas relacionados con el estrés, es decir, aumentando el fumar, la cafeína, la comida, sueño si descanso, pueden ser todos banderas rojas que indican vulnerabilidad inminente a la recaída.

CAMBIOS EN HUMOR: Fluctuaciones emocionales fuertes tales como la depresión, la ansiedad, la cólera, el aburrimiento, incluso el entusiasmo o la euforia pueden señalar una recaída en proceso.

Un cambio en una o más de estas áreas puede señalar una cadena de recaídas en proceso. Mientras que cualquier cambio sencillo puede ser mirado sólo como un mal día, a menudo una cadena de acontecimientos pueden ser considerados cuando el adicto es forzado a mirar más profundo cualquier señal de peligro.

Comprendiendo que esta cadena personal de acontecimientos es crucial para que el adicto se recupere y se estabilice eventualmente con menos recaídas.

ALGUNAS PREGUNTAS QUE NECESITAN SER PLANTEADAS SON:

¿Usted cuándo recayó?

¿Usted cómo reaccionó cuando recayó?

¿Cuáles fueron las señales de peligro de que la recaída venía?

Cambios de actitud
Cambios de pensamiento
Cambios del comportamiento
Cambios de humor / emocionales

¿Cuanto tiempo usted se involucró en la actividad de recaída?
¿Quién estaba con usted durante la recaída?

¿Dónde ocurrió su recaída?

¿Qué aprendió de su experiencia de recaída?

¿Cómo necesita cambiar o modificar su plan escrito de recaída para incorporar esta nueva experiencia en sus señales de peligro de recaída?

¿Usted qué hará, de diferente en el futuro, cuando vea que éstas señales de peligro de recaída comiencen a ocurrir?

Recuerda con Dios, siempre tenemos esperanza, porque él es Nuestra más grande esperanza.

Kathy Rodriguez.

domingo, 23 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Él Renovará Mis Fuerzas

“Escuchadme Costas y Renuévense pueblos; acérquense, y entonces hablen, estemos juntamente en juicio” Isaías 41:1

Todas las cosas sobre la tierra necesitan ser renovadas. Ninguna cosa creada continua por si misma. Los árboles que no son cuidados se desgastan en si mismos. Los árboles necesitan beber del agua de la lluvia y tomar de los tesoros del suelo para experimentar la genuina renovación. Los cedros de Líbano, los cuales Dios ha creado están llenos de vitalidad fresca que han sacado de la misma tierra.

Podrán acaso los hombres que viven en este planeta mantenerse sin renovación? Así como es necesario reparar el desgaste del cuerpo a través de la comida que diariamente tomamos, de la misma manera necesitamos reparar el desgaste del alma por alimentarnos con la comida celestial encerrada en la gloriosa y bendita palabra de Dios. Las flores se renuevan, las aves se renuevan, todo lo creado necesita renovación y hoy, yo, como ser humano creado por Dios también necesito renovación y esa renovación solo vendrá de la mano del Padre Celestial.

Si nuestra vida puede vivir sin Dios, entonces no soy un ser creado soy solo un sueño, pero si soy un ser creado por Dios entonces anhelaré recibir de Dios así como las flores ansían el rocío. Sin la restauración constante de nuestra vida nosotros no estaremos preparados para los ataques continuos del infierno y las aflicciones penetrantes de este mundo o para hacer frente a las disensiones humanas.

Cuando el torbellino se desate , si no me ha renovado en él, seré como árbol sacudido y finalmente quebrado ante su inclemencia, pero si me he renovado en Jesús vendré a ser como una roca que hará frente al vendaval o como marinero que desafía la tempestad mientras fortalece el mástil de su embarcación y lanzaré con firmeza el ancla de la fe. Por eso hoy quiero renovarme en él.

La Palabra de Dios me dice que los que esperan en el Señor renovaran sus fuerzas. Hoy quiero esperar en el Señor y hacer frente a las aflicciones con ánimo renovado, hacer frente a las luchas con una nueva fortaleza espiritual y hacer frente a las tentaciones con la fibra de vencedor.

Si me envanezco y creo que no es necesario renovarme, estaré preparando el camino para mi propia destrucción, porque como ser creado necesito ser renovado. Hoy es una nueva oportunidad para levantarme en fuerza y buscar el rostro de aquel que vive para siempre y que me da una nueva esperanza de vivir.

Gracias Señor por darme la oportunidad de renovarme en ti. Gracias porque como ser creado puedo encontrar en ti el rocío de tu presencia. Amén.

Dr. Serafín Contreras Galeano

sábado, 22 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Anuncio Comercial

El texto es de un comercial creado por Washington Olivetto que fue exhibido en los cines recientemente.
En el film la pantalla queda toda blanca y la narración dice lo siguiente:


Este comercial…
No tiene una mujer en biquini, no tiene cachorros, no tiene niños, no tiene un bebito, Este comercial no tiene una pareja, no tiene beso, no tiene una familia tomando el café de la mañana.

Este comercial no tiene música pegajosa, no tiene efectos especiales, no tiene una tortuga jugando con una pelota. Este comercial no tiene gente famosa, ni modelos publicitarios.

Porque este comercial es para vender un producto… que todos quieren comprar ! sin que nadie los convenza.
Que usted adora consumir… y tal vez hasta ya lo haya comprado…sólo que no se lo han entregando.

Es un producto que no tiene marca, no tiene slogan, no tiene envoltorio, ni hace promoción del tipo “lleve 3 y pague 2”.

Este comercial es todo blanco. Y de esta manera… puede ser entendido aquí y en el mundo entero.
Además, sería muy bueno si este comercial…se pudiera pasar en el mundo entero.

Porque el producto que este comercial quiere vender es… ¡PAZ!
Y mientras las personas que necesitan comprar la PAZ no la compren, Usted puede…

Tomar un poco de la PAZ que todavía tiene en casa… y usarla en el tránsito, en la fila del banco, en el ascensor o… cuando mira un partido de fútbol.

¡La PAZ es un producto interesante! Porque cuanto usted más la usa… ¡Más PAZ tiene!
Y si todo el mundo la usara… tal vez llegaría el día… en que nadie más… Tendría que hacer un comercial… ¡Para vender la PAZ!

Juan 14:27
“La paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo la da, yo os la doy. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
Salmos 34:14
“Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela.”
Salmos 37:11
“Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz.”
Salmos 119:165
“Mucha paz tienen los que aman tu ley; Y no hay para ellos tropiezo.”
Proverbios 3:1
“Hijo mío, no te olvides de mi ley; Y tu corazón guarde mis mandamientos porque largura de días, y años de vida y paz te aumentarán.”


Agradecimiento especial por su aporte a Jazmin Ceron Sarmiento -Colombia-

jueves, 20 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Trabaja en conocerte

Mientras trazaba un mapa de los conceptos y escribía gran parte de los contenidos de este libro, cumplí cincuenta y siete años. Casi me sorprendió darme cuenta lo mucho que esta vez me alegró la fecha. En otro momento de mi vida, hubiera discutido, como quizás lo hagas tú ahora, el valor del ritual de cumplir años. Hasta no hace tanto, yo sostenía que estas “niñerías” son pertinentes y razonables solamente en el mundo infantil de nuestros hijos o nietos. Para ellos, solía decir yo, el festejo de cumplir un año más se justifica ampliamente si lo pensamos como una mínima compensación anticipada de lo que se avecina con el crecimiento: el desembarco de más responsabilidades, más deberes y cada vez más obligaciones. Pero a nuestra edad, seguía argumentando, esto no parece motivo de ningún festejo.
Nuestro propio lenguaje, a veces tan esclarecedor, parece hacernos saber desde el principio que el día del cumpleaños no trae consigo demasiadas buenas noticias. Combina en su nombre dos palabras que no en vano nos agobia pronunciar: “cumplir” y “años”, como si quisiera condenarnos a envejecer y obedecer, haciéndonos olvidar, quizás no tan ingenuamente, lo que sí se debe festejar.
Porque el día del cumpleaños, ese mismo día, se festeja nada más y nada menos que un aniversario más del día de nuestro nacimiento. En la mayoría de los idiomas (inglés, francés, catalán, hebreo y chino por nombrar sólo algunos), la palabra que se usa para cumpleaños se puede traducir literalmente como “día del nacimiento” o “día del aniversario”.
Decididamente, no pretendo empezar ninguna rebeldía lingüística para cambiar el idioma, pero quiero conseguir que seamos conscientes de este hecho más que condicionante, para evitar que el peso etimológico de la palabra “cumpleaños” nos arruine la fiesta.
De hecho, sostengo que:
• Si nos hemos dado cuenta que vivir es una cosa deseable y nos sentimos contentos por ello…
• Si hemos descubierto que queda mucho por hacer y que lo haremos…
• Si podemos sentir más que “muy de vez en cuando” alegría al despertar cada mañana…
Entonces, tal vez podamos recuperar de corazón el deseo de celebrar nuestros cumpleaños, y porque no, de compartir con otros la alegrías de estar vivos un año más.
Y llegados aquí, no será fácil establecer naturalmente esta sana costumbre que recomiendo casi a cada persona que me consulta:
HACERNOS, ESE DÍA, EL REGALO QUE MAS NOS GUSTARÍA QUE NOS HICIERA NUESTRO AMIGO MÁS CERCANO E INCONDICIONAL.
Es muy sugestivo ver cómo muchos vivimos pensando y comprando regalos de cumpleaños para los que queremos y casi nunca lo hacemos con nosotros mismos.
Vuelvo a mi novedosa experiencia:
• Quizá por mi mayor conciencia de una vida más que afortunada.
• Tal vez por la certeza de sentirme transitando el camino que yo mismo elegí para mí.
• Posiblemente por la alegría de que mis años me encuentren embarcado en un nuevo proyecto.
• Seguramente por estar asistiendo, orgulloso, a la madurez de mis dos hijos.
• Probablemente, por la suma de todo lo dicho y más cosas, este año celebré mi 57° cumpleaños.
Fiel a lo que enseño, me regalé la última grabación de Rigoletto en las Arenas de Verona y también una más que discreta reunión, a la que me di el gusto de invitar a mis amigos más queridos, a algunos colegas y a muchos compañeros de ruta a los que hacía mucho tiempo no veía. Allí, en la fiesta que me había montado para compartir mi alegría, confirmé lo que sostengo desde hace muchos años: ningún vínculo constructivo con los demás se puede establecer y fortalecer si no se apoya en una buena relación de cada uno consigo mismo. Y este concepto no es más que la mejor expresión de la necesaria cuota de sano egoísmo.
Un camino cuyo último paso coincidirá con la autorrealización, y cuyo primer paso no puede ser otro que el de conocerse, saberse, descubrirse….
• Des-cubrirse, es decir, quitar la cobertura que me impide verme.
• Animarme a dejar de lado las máscaras.
• Mostrarme ante mí y ante los demás tal como soy.
• Asumir la responsabilidad de todo lo que soy; que incluye todo lo que hago y todo lo que digo.
Conocernos es el primer paso si pretendemos pedirles a los otros que sean observadores de nuestras vidas.
Conocernos consiste en tomarnos el tiempo de mirarnos interiormente, conectar con lo que creemos, con lo que pensamos, con lo que sentimos y con lo que somos, más allá de todo lo que a otros les gustaría.
Conocernos es empezar por el principio. Por la primera de aquellas tres preguntas existenciales que acompañan al hombre desde los tiempos más lejanos y que aparecen en todas y cada una de las culturas ancestrales: ¿Quién soy? ¿Dónde voy? ¿Con quién?
Tres preguntas que, como siempre digo, deben ser contestadas en ese riguroso orden, aunque solo sea para impedir que sea mi rumbo el que determine quién soy y acabe volviéndome esclavo de mi camino. Tres preguntas que, respondidas en orden, una y otra vez, alcanzarán para evitar que mi compañera o compañero de ruta se crean con el derecho o la responsabilidad de decidir por mí el camino a seguir.
Un cuento algo Kafkiano nos ayudará en este punto a reírnos de nosotros mismos.
Un hombre viaja en metro.
Está pensando en el trabajo que le espera en la oficina.
De repente, alza la vista y le parece que otro hombre en el asiento de frente lo mira fijamente.
En su abstracción, ni siquiera nota que lo que ve es solamente su imagen reflejada en un espejo.
-¿De qué conozco a este tipo?- se pregunta al notar que su rostro le es familiar.
Vuelve a mirar y la imagen, como es obvio, le devuelve la sonrisa.
-Y él también me conoce- se dice en silencio.
Por más que intenta dejar de pensar en esa imagen de la cara familiar, no consigue alejarla de su pensamiento.
El hombre llega a su destino y, antes de ponerse de pie para bajar del tren, saluda a su supuesto compañero de viaje con un gesto que, como no podía ser de otra manera, el otro le devuelve inmediatamente.
-¿De qué conozco yo a este tipo?
Cómo le gustaría tener una fotografía de ese hombre para poder mostrársela a sus compañeros. Quizá alguno de ellos podría ayudarle a identificarlo…
Al finalizar su jornada, decide caminar hasta su casa para darse el tiempo de buscar en su memoria.
Una hora más tarde entra en su apartamento, todavía sin respuesta. Se ducha, cena, mira la televisión, pero no puede prestar atención.
-Dónde he visto a este hombre?-se pregunta todavía al acostarse.
A la mañana siguiente se despierta con una sonrisa…
-Ya sé- dice en voz alta, sentándose de golpe en la cama y golpeándose la frente con la palma de su mano- ¿Cómo no me di cuenta antes?
Ha resuelto el problema que lo tenía preocupado.
-¡Lo conozco de la peluquería…!
Si no empezamos por conocernos será imposible saber quiénes somos, reconocernos en nuestros actos y hacernos responsables de cada uno de ellos. Nunca sabremos con claridad cuál es le límite entre el adentro y el afuera.
Si es cierto que queremos conocernos, debemos aprender a mirarnos con valentía, decidiendo simplemente ser, aún a riesgo de perdernos por un rato.
Solo así podremos lograr que sea nada más que lo interior lo que nos defina. Una tarea de por sí difícil, sobre todo si uno pretende afrontarla sin aislarse de los demás, sin renunciar a sus grupos de pertenencia social, familiar o laboral. Y que quede claro que esto no significa ignorar a los demás ni volverse sordo a sus opiniones, entre otras cosas porque sé que necesitamos de sus miradas para completar nuestra percepción de nosotros mismos, pero ver todos esos aspectos que se ocultan en puntos ciegos a nuestra mirada; eso significa no condenarnos a andar por el mundo preguntando a los demás quiénes somos o cómo deberíamos ser.
¿No deberíamos anticipar lo social a lo individual?
Ahora, sigo sosteniendo que al objetivo del bienestar común le vendría muy bien que cada uno empezara por ocuparse de su propio desarrollo, aunque solo sea para ayudar de la forma más apropiada, justa y eficaz al prójimo.
Durante la semana el niño había perseguido literalmente al padre por toda la casa con su tablero de parchís debajo del brazo. Quería que el hombre se sentara con él a cumplir su promesa de jugar una partida para estrenar el nuevo tablero que le habían regalado para su cumpleaños.
- Ahora no puedo, Huguito- le había dicho más de una vez-, tendremos que esperar al fin de semana…
Por eso el sábado, apenas se levantó, Hugo vio a su padre sentado en el escritorio, y corrió a su cuarto a buscar el tablero todavía sin estrenar.
-Hoy es fin de semana, ¿no, papi?- preguntó el pequeño.
-Sí, hijito- reconoció el padre-, pero ahora tengo que terminar un trabajo atrasado. Pídele a tu madre que juegue contigo…
-No, no- protestó la pulga de seis añitos-Tú me prometiste…
-Es verdad. Pero en este momento tengo otras cosas más urgentes que atender…
-¿Y cuándo vas a terminar de atender esas cosas?
-Dentro de dos horas- dijo el padre exagerando, con la intención de desanimarlo.
-¡Buf!… –dijo el niño, y dándose la vuelta salió de la habitación.
La aguja grande había alcanzado a la pequeña justo cuando ésta llegaba al número 1, y eso, según le dijo su madre, significaba que habían pasado exactamente dos horas.
-¿Jugamos ahora, papi?
-No, hijo. Lo siento. Todavía no he terminado con mis cosas…
-Pero tú me dijiste dentro de dos horas… Eso es mentir.
-No seas así, Huguito, tengo trabajo pendiente.
El niño ya empezaba a dejar escapar un par de lágrimas, cuando su padre tuvo una idea. Cogió de su escritorio una revista que mostraba en la tapa un colorido mapa del mundo con división política.
-Mira, hijito, te voy a proponer un juego-le dijo, mientras arrancaba la hoja y buscaba en el cajón de su escritorio un par de tijeras.
El hombre hizo varios cortes, transformándole la hoja en un montón de papeles de forma irregular.
-Esto es un rompecabezas… Un puzzle como lo llamas tú.
El juego consiste en montar el mapa del mundo poniendo cada país en su sitio –dijo el padre-. Cuando termines de montar al mundo, jugaremos al parchís.
El padre sabía que, sin tener idea de cómo era el planisferio, el niño tardaría más de una hora en montarlo y que eso los llevaría hasta el almuerzo. Después de su siesta, quizá podría finalmente sentarse a jugar con su hijo, como le había prometido.
Otra vez resoplando, pero intuyendo que si no aceptaba esas condiciones no habría parchís, el jovencito cogió los papeles que su padre le daba y se fue a su cuarto.
Pasaron cinco minutos, quizás seis, cuando Huguito entró en la habitación con el mapa del mundo perfectamente montado.
Cada país en su sitio y toda la hoja pegada con cinta adhesiva.
-Ya está, papi. ¿Ahora vamos a jugar parchís?
El padre sonrió, confuso.
-¿Pero cómo lo has hecho?- Preguntó examinando el perfecto resultado-.Si tú nunca has visto un mapa del mundo, ¿cómo lo has montado tan rápido?
-No, papi… Yo nunca había visto un mapa del mundo como éste… Cuando lo recortaste yo vi que en el otro lado de la hoja había una foto de un hombre. Entonces, al llegar a mi cuarto, di la vuelta a los papelitos y coloqué las partes del señor, una al lado de la otra. Fue fácil. Cuando terminé de acomodar al hombre, el mundo se acomodó solo.
Puede que sea una deformación personal, pero después de tantos años estoy convencido de que solamente trabajando con los individuos será posible que se dé el cambio que queremos para el mundo.
Será por una deformación profesional, pero después de tantos años sigo creyendo que solamente sabiendo quiénes somos podremos empezar el trabajo de ser mejores para nosotros mismos y para la humanidad.

Bucay, Jorge. (2007) 20 pasos hacia delante (Tercera edición). Buenos aires, Argentina. Editorial Del Nuevo extremo

miércoles, 19 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



El Paciente de la Ventana

Dos hombres, gravemente enfermos, compartían el mismo cuarto en un hospital.
A uno de ellos lo hacían sentar una hora por día recostado en su respaldo para favorecer un drenaje. Su cama daba a la única ventana del cuarto. La cama del otro, en la otra extremidad quedaba al margen de toda posibilidad de ver hacia afuera.
Los enfermos, tanto como podían, pasaban horas conversando desde sus camas, evocando sus familias, sus trabajos, sus amigos, sus viajes…
Cuando sentaban al enfermo de la ventana en su cama, éste pasaba su hora de tratamiento describiendo a su compañero lo que veía al exterior. Había un hermoso bosque en donde frecuentemente se veían animales.
Un lago en donde los cisnes nadaban y los niños entusiasmados hacían navegar sus barquitos a vela. Un césped y un jardín en donde se diría que las flores habían sido coloreadas por el arco iris. El enfermo del otro extremo del cuarto, desde hacía días había comenzado a vivir de nuevo a través de las animadas escenas descritas por su amigo de la ventana. Este le contaba que los jóvenes enamorados caminaban unidos por el brazo. Más lejos dos esposos se divertían con sus niños haciendo volar un barrilete.
Y ahora, cosa inesperada, una banda de músicos uniformados con vivos colores pasaba a lo largo del lago atrayendo los paseantes. Claro que la ventana cerrada impedía a los enfermos oír la música. Lástima, pero evidentemente y a juzgar por el entusiasmo de la gente descrito por el relator, debían tocar muy bien. Mientras el hombre de la ventana describía las imágenes que desfilaban ante sus ojos, el otro cerraba los suyos e imaginaba las pintorescas escenas. Los días y las semanas pasaban, y cada día el hombre del fondo del cuarto esperaba con cierta ilusión las descripciones de su amigo.
Una mañana, la enfermera llegó para lavar a los pacientes, y encontró con tristeza el cuerpo sin vida del enfermo de la ventana que se había ido paciblemente durante el sueño. Llamó a los dependientes del hospital para que retiraran el cuerpo.
Tiempo después, y tan pronto como le pareció oportuno, el otro enfermo, no sin tristeza pidió a la enfermera si podía desplazarlo al lugar de la ventana. Esperaba ver por sus propios ojos las coloridas imágenes que durante tantos días su amigo le había transmitido.
La enfermera, contenta de poder proporcionarle ese servicio, lo cambió de lugar, y en cuanto constató que el enfermo estaba cómodo lo dejó sólo.
Lentamente éste se deslizó en su cama, hasta lograr incorporarse lo suficiente para mirar a través de la ventana. Pero para su inesperada sorpresa, delante de él y pocos metros hacia afuera, se interponía un enorme muro blanco.
Contrariado, el enfermo preguntó más tarde a la enfermera, cuál razón habría llevado a su compañero fallecido a describirle tantas falsas escenas. “Imposible que las viera”, contestó la enfermera, su compañero era ciego, y evidentemente no podía ni siquiera ver el muro de enfrente. El inventó todo, porque seguramente deseaba comunicarle a usted la alegría de vivir.”
Hacer felices a los otros es el secreto de la propia felicidad. La economía de la alegría es extraña.
Un dolor compartido se reduce a la mitad, pero la felicidad compartida se multiplica al doble.
1 Pedro 1:22
Habiendo purificado vuestra almas en la obediencia de la verdad, por el Espíritu, en caridad hermanable sin fingimiento, amaos unos á otros entrañablemente de corazón puro.
2 Corintios 1:7
Y nuestra esperanza de vosotros es firme; estando ciertos que como sois compañeros de las aflicciones, así también lo sois de la consolación.
Romanos 15:13
Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz creyendo, para que abundéis en esperanza por la virtud del Espíritu Santo.

lunes, 17 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



El Piloto

Cuentan de este individuo que abordó un avión para viajar a Nueva York. Un niño entró buscando su asiento y se sentó justo al lado suyo. El niño era muy educado. Y paso el tiempo coloreando en su libro de pintar.
No presentaba rasgos de ansiedad ni nerviosismo al despegar el avión. El vuelo no fue muy bueno, hubo tormenta y mucha turbulencia. De momento una sacudida fuerte, y todos estaban muy nerviosos, pero el niño mantuvo su calma y serenidad en todo momento.
¿Cómo lo hacía?, ¿Por qué su calma? Hasta que una mujer frenética le preguntó:
- Niño: ¿no tienes miedo?
- No señora”, contestó el niño y mirando su libro de pintar le dice:
-”Mi padre es el piloto”.
¿Sorprendido?
Hay tiempos en nuestra vida que los sucesos nos sacuden un poco y nos encontramos en turbulencia. No vemos terreno sólido y nuestros pies no pisan lugar seguro. No tenemos de dónde agarrarnos, y no nos sentimos seguros. Pero recordemos que nuestro amadísimo Padre Celestial es nuestro piloto. A pesar de las circunstancias, nuestras vidas están puestas en el creador del cielo y la tierra. Y la próxima vez que llegue una tormenta a tu vida o si en este momento estás pasando por una, alza tu mirada al cielo, siéntete confiado y di para ti mismo:
¡Mi Padre es el piloto!
Nahúm 1:7
 Bueno es Dios para fortaleza en el día de la angustia; y conoce á los que en él confían.
Hechos 18:9-10 
Entonces él Señor dijo de noche en visión á Pablo: No temas, sino habla, y no calles: Porque yo estoy contigo, y ninguno te podrá hacer mal.
Salmos 9:9 
Y será Dios refugio al pobre, Refugio para el tiempo de angustia.
Salmos 18:2 
Roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fuerte mío, en él confiaré; Escudo mío, y el cuerno de mi salud, mi refugio.
Salmos 32:7
 Tú eres mi refugio; me guardarás de angustia; Con cánticos de liberación me rodearás.
Agradecimiento Especial Por su Aporte a Pablo Sánchez- Costa Rica

domingo, 16 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Te Amaré Señor

El Señor es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fuí ayudado. Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré? Salmo 28:7

Hoy, recuerdo con alegría el día que en angustia mi alma se debatía, en mi desesperación levanté mis ojos al cielo y junto con mis ojos , todo mi corazón. Ya fuerzas no tenía, pero con el poco aliento que aún permanecía, te Dije: Oh, Dios, ya no puedo, ayúdame….y fue en ese momento que sentí lo que nunca antes había sentido….tu amor comenzó a fluir e inundar todo mi ser… En medio de la turbación….fuiste refugio para mí y escudo en medio de la batalla más cruenta que jamas he vivido.

Como no he de exaltarte hoy. Este es el nuevo día que me das….Sin duda habrá turbaciones, tormentas, batallas campales y sin misericordia, pero la satisfacción que siento es que nuevamente serás mi refugio y mi escudo.

.Mi corazón puede confiar en ti….y se que jamás será avergonzado—Como diste ayuda ayer…me la darás hoy. Cuando mi corazón está reposado en ti…entonces puede salir el cántico de mi alma. Es un canto de seguridad. Señor…Hoy, con confianza , seguridad, amor…devoción y profundo respeto puede cantarte.

Eres Tú Jesús
mi vida y mi razón
Hoy en ti señor
se inspira el corazón.

Eres Tú Jesús
mi vida y mi razón
Hoy en ti señor
se inspira el corazón.

Eres mi mayor deseo
mi gran necesidad
eres lo que yo mas quiero
por eso anhelo estar
siempre junto a ti
para amarte, amarte, amarte
para amarte, amarte, amarte

.Eres mi mayor anhelo.. mi gran necesidad.. Eres tú oh Dios….todo mi existir.

Este día es una nueva oportunidad para ver tu gloria, amor y majestad llenando mi existencia.

Contigo hay bastante y suficiente razón para vivir.

Amén


Serafin Contreras Galeano

sábado, 15 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Clavos

Esta es la historia de un muchachito que tenía muy mal carácter. Su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la paciencia debería clavar un clavo detrás de la puerta.

El primer día, el muchacho clavo 37 clavos detrás de la puerta.

Las semanas que siguieron, a medida que el aprendía a controlar su genio, clavaba cada vez menos clavos detrás de la puerta. Descubrió que era más fácil controlar su genio que clavar clavos detrás de la puerta.

Llegó el día en que pudo controlar su carácter durante todo el día.

Después de informar a su padre, este le sugirió que retirara un clavo cada día que lograra controlar su carácter.

Los días pasaron y el joven pudo anunciar a su padre que no quedaban más clavos para retirar de la puerta…

Su padre lo tomo de la mano y lo llevo hasta la puerta. Le dijo: “has trabajado duro, hijo mío, pero mira todos esos hoyos en la puerta. Nunca más será la misma. Cada vez que tu pierdes la paciencia, y te enojas eres capaz de dejar cicatrices en las personas exactamente como las que aquí ves, y es necesario que estas luego sean sanadas “.

Tu puedes insultar a alguien y retirar lo dicho o disculparte, pero del modo como se lo digas, lo devastará, y la cicatriz podría perdurar para siempre. Una ofensa verbal es tan dañina como una ofensa física. Los amigos son en verdad una joya rara. Ellos te hacen reír y te animan a que tengas éxito. Ellos te prestan todo, comparten palabras de elogio y siempre quieren abrirnos sus corazones.

Proverbios 15:1
La blanda respuesta quita la ira: Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Proverbios 12:18
Hay quienes hablan como dando estocadas de espada: Mas la lengua de los sabios es medicina.

Proverbios 15:2
La lengua de los sabios adornará la sabiduría: Mas la boca de los necios hablará sandeces.
Proverbios 21:23
El que guarda su boca y su lengua, Su alma guarda de angustias.
Salmos 119:172
Hablará mi lengua tus dichos; Porque todos tus mandamientos son justicia.

viernes, 14 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



El Paraguas

En un pueblito de zona rural en los años 50, se produjo una larga sequía que amenazaba con dejar en la ruina a todos sus habitantes, debido a que subsistían con el fruto del trabajo del campo. A pesar de que la mayoría de sus habitantes eran creyentes, ante la situación límite, marcharon a ver al Ministro religioso local y le dijeron:

- “Si Dios es tan poderoso, pidámosle que envíe la lluvia necesaria para revertir esta angustiante situación.”

- “Está bien, le pediremos al Señor, pero deberá haber una condición indispensable.”

- “¡Díganos cuál es!”, respondieron todos.

- “Hay que pedírselo con fe, con mucha fe, contestó el Líder.”

- “¡Así lo haremos, y también vendremos a la iglesia todos los días!”

Los campesinos comenzaron a ir a la iglesia todos los días, pero las semanas transcurrían y la esperada lluvia no se hacía presente. Un día, fueron todos a enfrentar al ministro y reclamarle:

- “Usted nos dijo que si le pedíamos con fe a Dios que enviara las lluvias, Él iba a acceder a nuestras peticiones. Pero ya van varias semanas y no obtenemos respuesta alguna.”

- “¿Han ustedes pedido con fe verdadera?”, les preguntó el ministro.

- “¡Sí, por supuesto!”, respondieron al unísono.

- “Entonces, si dicen haber pedido con Fe Verdadera… ¿porqué durante todos estos días ni uno solo de ustedes ha traído el paraguas?”

Hebreos 11:1 “Ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”

Mateo 21:22 “Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.”

Juan 15:16 “No me elegisteis vosotros á mí, mas yo os elegí á vosotros; y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca: para que todo lo que pidiereis del Padre en mi nombre, él os lo dé.”

jueves, 13 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Vuela Más Alto..!

Enseguida después de la 2a Guerra Mundial, un joven piloto inglés probaba un frágil avión monomotor en una peligrosa aventura alrededor del mundo. Poco después de despegar de uno de los pequeños e improvisados aeródromos de la India, oyó un ruido extraño que venía de atrás de su asiento y se dió cuenta que había una rata a bordo y que si roía la cobertura de lona, podía destruir su frágil avión.

Podía volver al aeropuerto para librarse de su incómodo, peligroso e inesperado pasajero. De repente recordó que las ratas no resisten las grandes alturas.

Volando cada vez más alto, poco a poco cesaron los ruidos que ponían en peligro su viaje.

Puede que hayan situaciones u obstáculos que estén poniendo en peligro tu vida espiritual, NO permitas que esto te derribe, VUELA MÁS ALTO..!!

Elévate a la presencia de Dios, Él te hará levantar vuelo y te hará volar siempre alto, muy alto, y desde arriba podrás ver tus problemas como insignificancias y en Su presencia perecerán…!

Habacuc 3:19
”Señor es mi fortaleza, El cual pondrá mis pies como de ciervas, Y me hará andar sobre mis alturas”

Job 16:19
”Mas he aquí que en los cielos está mi testigo, Y mi testimonio en las alturas.”

Job 25:2
”El señorío y el temor están con él: El hace paz en sus alturas.”

Salmos 93:4 “Dios en las alturas es más poderoso Que el estruendo de las muchas aguas, Más que las recias ondas de la mar.”

Amós 4:13 “Porque he aquí, el que forma los montes, y cría el viento, y denuncia al hombre su pensamiento; el que hace á las tinieblas mañana, y pasa sobre las alturas de la tierra; Dios de los ejércitos, es su nombre.”

Hebreos 1:3″El cual siendo el resplandor de su gloria, y la misma imagen de su sustancia, y sustentando todas las cosas con la palabra de su potencia, habiendo hecho la purgación de nuestros pecados por sí mismo, se sentó á la diestra de la Majestad en las alturas,”

miércoles, 12 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Amor En Cajita de Leche

Dos hermanitos en puros harapos, uno de cinco años y el otro de diez, iban pidiendo un poco de comida por las casas de la calle que rodea la colina.

Estaban hambrientos: “vaya a trabajar y no molesten”, se oía detrás de la puerta; “aquí no hay nada, pordiosero…”, decía otro…Las múltiples tentativas frustradas entristecían a los niños…Por fin, una señora muy atenta les dijo: “Voy a ver si tengo algo para ustedes… ¡Pobrecitos!”
Y volvió con una cajita de leche.
¡Que fiesta! Ambos se sentaron en la acera.

El más pequeño le dijo al de diez años: “tú eres el mayor, toma primero…y lo miraba con sus dientes blancos, con la boca medio abierta, relamiéndose”.

Yo contemplaba la escena como tonto… ¡Si vieran al mayor mirando de reojo al pequeñito…!

Se lleva la cajita a la boca y, haciendo de cuenta que bebía, apretaba los labios fuertemente para que no le entre ni una sola gota de leche.

Después, extendiéndole la lata, decía al hermano:

“Ahora es tu turno. Sólo un poquito.”

Y el hermanito, dando un trago exclamaba: “¡Está sabrosa!”

“Ahora yo”, dice el mayor. Y llevándose a la boca la cajita, ya medio vacía, no bebía nada.

“Ahora tú”, “Ahora yo”, “Ahora tú”, “Ahora yo”…

Y, después de tres, cuatro, cinco o seis tragos, el menorcito, de cabello ondulado, barrigudito, con la camisa afuera, se acababa toda la leche… él solito.

Esos “ahora tú”, “ahora yo” me llenaron los ojos de lágrimas…

Y entonces, sucedió algo que me pareció extraordinario.

El mayor comenzó a cantar, a danzar, a jugar fútbol con la caja vacía de leche.

Estaba radiante, con el estómago vacío, pero con el corazón rebosante de alegría.

Brincaba con la naturalidad de quien no hace nada extraordinario, o aún mejor, con la naturalidad de quien está habituado a hacer cosas extraordinarias sin darles la mayor importancia.

De aquél muchacho podemos aprender una gran lección: “Quien da es más feliz que quien recibe.”

Es así que debemos amar. Sacrificándonos con tanta naturalidad, con tal elegancia, con tal discreción, que los demás ni siquiera puedan agradecernos el servicio que les prestamos.”

¿Cómo podrías hoy encontrar un poco de esta “felicidad” y hacer la vida de alguien mejor, con más “gusto de ser vivida”?

¡Adelante, levántate y haz lo que sea necesario!

Cerca de nosotros puede haber un amigo que necesita de nuestro hombro, de nuestro consuelo y, quizá aún más, de un poco de nuestra paz….

Hechos 20:35
“Más bienaventurada cosa es dar que recibir”.
Lucas 6:21
“Bienaventurados los que ahora tenéis hambre; porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.”

martes, 11 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Cuarto para las doce

¿Has observado que el panorama suele verse más negro poco antes de ocurrir un viraje positivo?

El hombre de negocios afirma que justo antes de hacer su fortuna, estaba a punto de claudicar. Le llegaba el agua al cuello cuando, de repente, todo empezo a cambiar.

A punto de renunciar, se mantuvo firme justo lo necesario para dar a su trayectoria un giro de ciento ochenta grados y cosechar los frutos.

Quizás te haya ocurrido que cuando sientes que no vale la pena vivir, aparece una persona en tu vida que eleva tu ánimo hasta las nubes.

La vida es así porque existe el principio del “cuarto para las doce”.
 Siempre hace mas frío y esta más oscuro antes del amanecer. Si resistimos lo suficiente, recibiremos nuestra recompensa.

En el acto de dar a luz, este principio entra en acción. Justo antes del gran milagro de la vida, la resistencia de la futura madre es sometida a una prueba de fuego, por medio de intensos dolores y gran angustia
. (¡dice mi mamá que valió la pena!).

En cuanto reconocemos la existencia del “cuarto para las doce”, la vida pierde mucho de su carácter traumático. En efecto, la creación parece someternos a prueba todo el tiempo, para ver si en verdad tomamos en serio nuestras metas. Si resistimos ese poquito mas… ¡oh alegría!

Conocer este principio es tener una buena ventaja, cuando todo es un caos, podemos decirnos: “¿de modo que todo marcha mal? Eso quiere decir que aquello por lo que tanto he luchado puede estar a la vuelta de la esquina”.

Por lo tanto, deberíamos sentirnos mejor.

Generalmente estaremos a prueba, en alguna forma, antes de recibir algo valioso. Si estamos conscientes del principio del “cuarto para las doce” y enfrentamos las dificultades conscientes de que son parte del proceso de lograr el éxito, en primer lugar no seremos desertores y, en segundo, obtendremos lo que queremos en la vida.

Cuando todo se ve “color de hormiga” puede ser el momento de celebrar. Quizás ya estes cerca de la meta.

Amigos, que esta semana sea el “cuarto para las doce” de sus más caros anhelos.

Andrew Mathews

Juan 4:35, “¿No decís vosotros: Aún faltan cuatro meses para que llegue la siega? He aquí os digo: Alzad vuestros ojos y mirad los campos, porque ya están blancos para la siega.”
Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien,”.

lunes, 10 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hacer o no hacer ¿Qué hago con mi vida?

“Nunca sopla viento favorable para el marino que no sabe en que puerto echar anclas.”
Proverbio americano


Uno de los asuntos que más llega a nuestro buzón de correos es la pregunta ¿Qué hago con mi vida? Estoy en una encrucijada, no se que hacer y si lo debo hacer. Están con indecisiones, no quieren tomar decisiones por temor a equivocarse, a fracasar. Razones tiene el proverbio mencionado arriba. Hay un relato árabe:

“Cuentan que aquella noche era especialmente fría en el desierto. Abdalá montó su pequeña tienda de campaña, tan pequeña que apenas cabía él acostado. Se despidió de su camello, llamado “Indecisión”, acariciándole la cabeza, pero dejándolo fuera, y se dispuso a pasar una noche tranquila y reparadora.

Apenas había conciliado el sueño cuando el camello lo llamó con voz suave, pero insistente. “Déjame meter la nariz en tu tienda, hace mucho frío y la tengo completamente helada…” Abdalá, que era un hombre bueno, accedió a la petición.

Pero ocurrió que en cuanto se durmió profundamente, el camello empujó un poco y metió la cabeza completa. Como la tienda era tan pequeña, al hacer esto topó con la cabeza del hombre y lo corrió hasta que éste sacó los pies por el otro extremo. Abdalá protestó, pero “Indecisión” le hizo ver que eso no era en realidad gran cosa. Pasó poco tiempo para el camello metiera los hombros y empujara a su patrón afuera, hasta las rodillas. Para hacer el cuento corto, “Indecisión” siguió introduciéndose en la tienda, llenándola por completo y sacando a Abdalá por el otro extremo, hasta que finalmente quedó completamente fuera.”

¿Le suena esto conocido? ¿No le ha ocurrido alguna vez que al dejar entrar un poco de indecisión ésta lo llenó todo, sacándolo de las cosas buenas de la vida? La indecisión no es buena para nada, la indecisión es el obstáculo que te impide alcanzar ese resultado extraordinario en la vida, en tu matrimonio, en tus finanzas, en tu carrera o en tu ministerio. Debes tomar decisiones.

Día a día las personas enfrentamos el desafío de tomar decisiones y es que la vida es un asunto de decisión. Nos preguntamos: ¿Qué carrera voy a estudiar? ¿Con quién me casaré? ¿Me conviene esta persona? ¿Cuántos hijos tendré? ¿Dónde viviré? ¿Cómo viviré? ¿Cómo pagaré esta deuda? Entre otras preguntas que nos hacemos, es un hecho que todos los días tenemos que tomar decisiones, pero no nos gusta tomarla y esperamos que alguien decida por nosotros. Es tiempo de hacer decisiones, no temas.

La Biblia enseña en el Salmo 32:8: “Tú me dijiste: “Yo te voy a instruir; te voy a enseñar cómo debes portarte. Voy a darte buenos consejos y a cuidar siempre de ti.”

Las decisiones que tomamos hoy afectarán nuestro rumbo mañana., lo que decidamos hoy no solo impactará nuestro futuro, sino también el de otras personas y todo lo que nos rodea. Tomar buenas decisiones dependerá de los valores que hemos incorporado en nuestra vida. Una carrera, un matrimonio, el estilo de vida que deseo o aun cosas sencillas como qué comeré o cómo me vestiré serán decisiones que tomaré por los valores que poseo. La mayoría de las decisiones no son tomadas en una sola vez. Las decisiones toman tiempo para ser completadas, por ello es importante que aprendas a escuchar a Dios.

Sófocles decía: Las decisiones rápidas son decisiones inseguras. Deje ya de decidir a la ligera y aprenda a hacer buenas decisiones. No siga el camino que le lleva atrás, marche hacia adelante sabiendo y tomando decisiones de manera personal. Quiero compartir contigo algunas ideas que te ayudarán a tomar buenas decisiones:

1. Se lo más PRECISO posible. ¿Qué es lo quieres lograr? Examina y encuentra cuáles son las cuestiones importantes y cuáles no. ¿Qué dice la Biblia respecto a ese asunto?

2. Busque soluciones. Vea todas las POSIBILIDADES existentes en relación con la cuestión que hemos de resolver. ¿Qué es sabio hacer? ¿Qué haría JESUS?

3. ELIGE la solución que más convenga para lograr el resultado que busca. Nunca tomes una decisión basada en una emoción o en un sentimiento. ¿Lo qué decido agrada a Dios?

4. PON EN MARCHA la decisión. No tema al fracaso, este dispuesto a aprender de sus errores, pero decida.

5. EVALUE cómo le está yendo, para rectificar en caso de que los resultados no hayan sido los esperados.

¿Tiene dificultad para hacer decisiones? Dios te ayudará, confía en El. La Biblia enseña en Santiago 1:5, “Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie”.

Recuerda antes de decidir ten presente que es tu decisión, nadie debe decidir por ti. Que puedes hacer lo que quieras, pero lo tienes que hacer tú, y hoy porque el mañana aun no llega, no postergues o no esperes a decidir después. La mejor decisión que puedes hacer hoy es adquirir sabiduría. Hoy tu puedes elegir la persona quien te gustaría ser, la vida que quieres vivir. La decisión es tuya.

“La mejor decisión que podemos tomar es la correcta, la segunda mejor es la incorrecta, y la peor de todas es ninguna.” Theodore Roosevelt

En amor y liderazgo,

Pedro Sifontes

Conferencista y Entrenador de Liderazgo y Coaching.

Panamá.

domingo, 9 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Dios aprieta pero no ahorca

“No te preocupes por lo que no entiendas de la Biblia. Preocúpate por aquello que entiendes y no aplicas en tu vida.” Corrie Ten Boom

Cuantas veces nos hemos encontrado en una situación difícil, con un problema muy grande donde no vemos solución, solo vemos nubes grises o negras sobre nuestra cabeza. Pensamos que Dios la tiene agarrada conmigo, y nos decimos: “Pero ni siquiera pego una con Dios”, “la vida es dura”, “nunca debí haber nacido”, “nunca debí haber hecho esto”, “como fui tan tonto” y pare usted de contar las conversaciones y juicios que tenemos de nosotros y del mundo que nos rodea. Me hace pensar en la vida de José el Soñador, todo lo que le tocó vivir antes de llegar a ser el Gobernador de Egipto, el pudo haber tenido esa clase de conversaciones pero lo que aprendemos de José es su actitud ante la adversidad.

Qué triste sería que tu vida se detuviera ahí en el problema, perdiéndote de muchas cosas que puedes disfrutar si tan solo cambiaras tu actitud sobre lo que te puede llegar a suceder. Como a José el Soñador Dios puede tornar todo el mal en bien.

Hay muchas historias sobre las actitudes, esta me pareció interesante: Se trata sobre la manera en que una madre criaba a su hijo.

“Entraba en su dormitorio y lo despertaba a las 5:30 AM, diciendo “Luis, hoy va a ser un gran día”. Pero eso no era lo que el niño deseaba oír a esa hora de la mañana. Su primer trabajo cada día era salir y traer el carbón para encender el fuego y calentar la casa. Lo aborrecía.

Un día, cuando su madre entró al cuarto y dijo “Va a ser un gran día”, Luis respondió bruscamente: “No mamá. Va a ser un día asqueroso. Estoy cansado. La casa está fría. No quiero levantarme y traer carbón. ¡Es un día horrible!”. Querido, ella contestó, no sabía que te sentías así. ¿Por qué no vuelves a la cama y duermes otro poco? ¿Por qué no pensé en esto antes?, Se dijo creyendo que había dado en el clavo.
Despertó dos horas después. La casa estaba caliente, y podía oler el desayuno que estaba preparando. Salió de la cama, se vistió y fue a sentarse a la mesa de la cocina. Estoy hambriento, dijo. He descansado bien. Ya está listo el desayuno. Esto está perfecto.
Querido, dijo la mamá, hoy no hay comida para ti. ¿Recuerdas que dijiste que iba a ser un día horrible? Como madre, voy a hacer lo mejor que pueda para que tengas un día horrible. Vuelve a tu dormitorio y quédate allí todo el día. No tienes permiso para salir de allí, y vas a tener poco que comer hoy. Nos veremos mañana a las cinco y media. Luis regresó a su dormitorio desanimado y se acostó. Pudo dormir más o menos otra hora. Pero eso era todo lo que una persona puede dormir. Pasó todo el día deprimido en la habitación, con un hambre que crecía con el paso del tiempo. Cuando oscureció volvió a meterse en la cama y trató de dormir. Despertó varias horas antes del amanecer. Se vistió. Estaba sentado en la orilla de la cama cuando la mamá abrió la puerta de su habitación a las cinco y media. Antes que ella dijera algo, Luis se puso de pie de un salto y dijo “Mamá, va a ser un gran día”.

Lo que era cierto para Luis es cierto para usted también. Podemos cambiar nuestra actitud hacia Dios, hacia la vida, hacia otras personas. Quizás hay cosas que no pueda cambiar, pero usted puede hacer que su actitud sea más positiva. Cuando nuestras actitudes superan nuestras habilidades, aún lo imposible se hace posible. Hay muchos beneficios en mantenerse con una actitud positiva.

Se han realizado investigaciones donde se ha comprobado que mantenerse positivo trae ventajas como buena salud, larga vida, felicidad, buenas relaciones, ascenso laboral, aumento de sueldo, buenos negocios, entre otras ventajas. Siendo positivo no es solamente un modo agradable de vivir, es el modo con el cual debemos vivir, vivir con amor, fe y esperanza.

A continuación te muestro nueve ventajas de mantener una actitud positiva.

1. La gente positiva vive más tiempo – aquellos que con regularidad expresan emociones positivas viven 10 años más sobre el promedio.

2. La gente positiva, optimista obtienen más que la gente pesimista, aquellos que dicen que la situación está dura.

3. Las personas positivas son capaces de hacer mejores decisiones bajo presión.

4. Los matrimonios tienen mayor probabilidad tienen éxito cuando la pareja experimenta actitudes positivas.

5. La gente positiva que con regularidad expresa emociones positivas son más resistentes afrontando la tensión, desafíos y adversidad.

6. La gente positiva es capaz de mantener una perspectiva más amplia y ver el cuadro completo que les ayuda identificar soluciones donde la gente negativa mantiene una perspectiva más estrecha y tiende a enfocarse en los problemas.

7. Emociones positivas como la gratitud y la apreciación ayudan a los atletas funcionar en un nivel más alto.

8. La gente positiva tiene más amigos que son un factor clave de felicidad y la larga vida. 9. Las personas positivas y sociables tienen más probabilidades para recoger el apoyo de otros, y recibir aumentos de paga y promociones y alcanzar el mayor éxito en el lugar de trabajo.

Sin entrar a analizar cada una de las ventajas, quedémonos con la enseñanza. Mantengamos buena actitud frente a la vida, seamos positivos. No te conviertas en un derrotista, Dios no patrocina fracasos ni perdedores. Hay asuntos en la biblia que usted entiende y son claras para su vida, póngalas en práctica, la obediencia es el lugar donde caen las bendiciones. En muchas situaciones el mensaje de Jesús fue: “conforme a tu fe, sea hecho” y el autor de los Hebreos nos recuerda: “sin fe es imposible agradar a Dios”. Hoy es el mejor día para cambiar nuestras actitudes, para ser positivo ante la vida. Tu puedes!
En amor y liderazgo,

Pedro Sifontes

Conferencista y Entrenador de Liderazgo y Coaching. Fundador y Director del Centro de Liderazgo Creativo. Pastor del Centro Familiar Internacional Las Buenas Nuevas, Panamá.

viernes, 7 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



El Tesoro Más Grande

No hay tesoro más grande que el ser humano pueda disfrutar que las promesas de Dios y las verdades que a través de su palabra vienen a nuestro corazón. Podemos tener dinero, cheques, tarjetas, cuentas bancarias y no tener ningún tesoro, porque el verdadero tesoro es el del corazón. Serafin Contreras G.

Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; 2 Pedro 1: 3,4.

jueves, 6 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Hoy… Proclamo Que El Señor es Rey

“El Señor es Rey eternamente y para siempre” Salmo 10:16


El mundo está lleno de gobernantes y cuando llegan las elecciones en nuestros países la lucha es encarnizada, el deseo es ardiente por ser presidente o gobernador. Qué es lo que mueve al ser humano a esta lucha encarnizada? Es realmente el deseo de servir a la comunidad? o es el deseo ambicioso de ser el primero, reconocido y llegar al enriquecimiento.

La Biblia habla de un gobernante quién no buscó ser Rey porque su deseo siempre ha sido el de servir.- Jesús es el único Rey eternamente y para siempre, el verdadero gobernante ungido. Quien tiene el favor del Padre y la plenitud de Dios. Hoy como su seguidor, lo proclamo Rey de toda mi vida.

Dios le ha dado todo poder y toda autoridad a Jesús. Como el hijo de Dios él es ahora cabeza sobre todas las cosas a su iglesia, y él reina sobre el cielo y sobre la tierra y aún tiene las llaves de la vida y de la muerte. No es Rey porque se impone, porque si él llamara a su iglesia para que lo elijan por votación, todos los creyentes votarían con gozo y efusión.

No hay desilusionados entre los realmente redimidos por su gracia y amor. La iglesia no escatimaría gasto alguno para proclamarlo Rey y si hubiese sufrimiento en esa proclamación , el sufrimiento sería placer. No solamente él es Rey…más seguirá siendo Rey…y aún el reinará. Eternamente él es Rey.

Todos hoy te saludan oh, Rey. Almas vírgenes van delante de ti, poniendo alfombras a tus pies y esparciendo en tu camino azucenas de amor y rosas de gratitud. Traigan delante del Rey la diadema real y coronémosle delante de todos.

Hoy proclamo que Jesús es el Rey de Sión por derecho de conquista. Él ha tomado y llevado la tormenta de mi corazón y de los corazones de la humanidad y ha eliminado a los enemigos que lo retuvieron por un momento en el calvario. En el mar rojo de su sangre, Jesús ha ahogado al Faraón de nuestros pecados. Él me ha liberado del yugo de hierro y de la maldición pesada de la ley. Nosotros somos su porción.

Quién le arrebatará su conquista? Nadie. Por ello hoy todos te saludan oh Rey Jesús. Nosotros alegremente te proclamamos Rey no solo del universo sino de nuestra vida. Hoy te proclamo Rey en mi diario vivir. Oh, Rey, que hoy puedas mandar en mi corazón para siempre, Dulce príncipe de paz.

Señor Jesús, Cuán grande es tu nombre . Rey eterno. Hoy quiero proclamar no solo con mis labios, más con mi manera de vivir que solo tu eres Rey. Rey eternamente y para siempre. Amén

Dr Serafín Contreras Galeano

miércoles, 5 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



¿Cuándo llegará el día de mi suerte?

Quiero comenzar con esta pregunta que muchos se han hecho en algún momento de su vida: ¿Cuándo llegará el día de mi suerte? Como que Dios la tiene agarrada conmigo, hay gente que no lo conoce y le va mejor que a mi, lo que alcanzo a ver son problemas y mas problemas desde que me levanto hasta que me voy a dormir. ¿Quién puede ayudarme? Si tan solo tuviera un día bueno, una oportunidad!

Eso que te dices son mentiras y son esas mentiras las que no te dejan disfrutar del maravilloso día que Dios te da. Cada día es una oportunidad para sentirte agradecido que tienes vida. Recuerda lo que dijo el salmista David: Hagamos fiesta en este día, porque en un día como éste Dios actuó en nuestro favor. Salmo 118:24 (BLS)

Es probable que todos los días no se sientan maravillosos, pero si usted mantiene una actitud positiva de seguro va a mejorar, créalo que funciona, yo mismo he pasado por esos días que parecen amargos, negativos pero me doy cuenta que no tiene sentido estar de esa manera, que no logro nada con esa actitud así que comienzo a buscar lo bello de la vida y buscar la oportunidad de gozarme.

La oportunidad toca hoy a tu puerta, puede ser que te encuentres atrapado en una mala relación, en un problema de adicción, depresión, ansiedad, quizás tengas problemas familiares, de salud o económicos, son tantos los problemas en lo que la gente suele encontrarse y muchas veces no saben como salir. Si te sientes identificado con la desesperanza y no puedes cantar en medio de la tormenta, si piensas que tus días se te están acabando me gustaría compartir una historia que me impactó.

Había un hombre muy rico que poseía muchos bienes, una gran estancia, mucho ganado, varios empleados, y un único hijo, su heredero. Lo que más le gustaba al hijo era hacer fiestas, estar con sus amigos y ser adulado por ellos. Su padre siempre le advertía que sus amigos sólo estarían a su lado mientras él tuviese algo que ofrecerles; después, le abandonarían.
Un día, el viejo padre, ya avanzado en edad, dijo a sus empleados que le construyeran un pequeño establo. Dentro de él, el propio padre preparó una horca y, junto a ella, una placa con algo escrito:”Para que nunca desprecies las palabras de tu padre”
Mas tarde, llamó a su hijo, lo llevó hasta el establo y le dijo: Hijo mío, yo ya estoy viejo y, cuando yo me vaya, tú te encargarás de todo lo que es mío… Y yo sé cual será tu futuro. Vas a dejar la estancia en manos de los empleados y vas a gastar todo el dinero con tus amigos. Venderás todos los bienes para sustentarte y, cuando no tengas más nada, tus amigos se apartarán de ti. Sólo entonces te arrepentirás amargamente por no haberme escuchado. Fue por esto que construí esta horca. ¡Ella es para ti! Quiero que me prometas que, si sucede lo que yo te dije, te ahorcarás en ella.
El joven se rió, pensó que era un absurdo, pero para no contradecir a su padre le prometió que así lo haría, pensando que eso jamás sucedería.
El tiempo pasó, el padre murió, y su hijo se encargó de todo, y así como su padre había previsto, el joven gastó todo, vendió los bienes, perdió sus amigos y hasta la propia dignidad. Desesperado y afligido, comenzó a reflexionar sobre su vida y vio que había sido un tonto. Se acordó de las palabras de su padre y comenzó a decir: ¡Ah!, padre mío… Si yo hubiese escuchado tus consejos… Pero ahora es demasiado tarde.
Apesadumbrado, el joven levantó la vista y vio el establo. Con pasos lentos, se dirigió hasta allá y entrando, vio la horca y la placa llenas de polvo, y entonces pensó: Yo nunca seguí las palabras de mi padre, no pude alegrarle cuando estaba vivo, pero al menos esta vez haré su voluntad. Voy a cumplir mi promesa. No me queda nada más…
Entonces, él subió los escalones y se colocó la cuerda en el cuello, y pensó: ¡Ah!, si yo tuviese una nueva oportunidad…
Entonces, se tiró desde lo alto de los escalones y, por un instante, sintió que la cuerda apretaba su garganta… Era el fin.
Sin embargo, el brazo de la horca era hueco y se quebró fácilmente, cayendo el joven al piso. Sobre él cayeron joyas, esmeraldas, perlas, rubíes, zafiros y brillantes, muchos brillantes… La horca estaba llena de piedras preciosas. Entre lo que cayó encontró una nota. En ella estaba escrito:
“Esta es tu nueva oportunidad. ¡Te amo mucho! Con amor, tu viejo padre”

¡Cuántas veces cometemos el error de despreciar la Palabra de nuestro Padre! ¡Cuantas veces clamamos a Dios por una nueva oportunidad! ¿Será que pensamos que las oportunidades tienen que venir con todos nuestros problemas resueltos? ¿No será, por el contrario, que la oportunidad pueda asemejarse a esta horca llena de piedras preciosas que muchos no considerarían? La horca representa el fracaso, las crisis, los problemas, pero también la victoria, el éxito y las oportunidades. Tu puedes sacar de los problemas las mejores enseñanzas de tu vida, busca en ellos oportunidades de aprendizaje que te conduzcan al éxito que buscas en tu relación, matrimonio, carrera o trabajo.

Oportunidad es cuando tú tienes el poder de aprovecharla, sino no lo es.

Sabes que hoy en día disfrutamos de inventos como la bombilla eléctrica en el caso de Thomas A. Edison, el teléfono en el caso de Alexander Graham Bell, que nos resultan más que obvios en cuanto a su oportunidad de éxito. Pero en algún momento no existieron. En ese vacío, ellos vieron una oportunidad… y las aprovecharon, y podemos disfrutar de ello.

Recuerda que las oportunidades llegan a nosotros cada día, no me refiero a “las grandes oportunidades”, me refiero a que cada día que vives es un día de suerte, es un día de gracia y favor, es la oportunidad para cambiar, para amar y perdonar, ¿Por que esperar a que otros cambien, a que otros te amen y te pidan perdón? El cambio empieza en uno.

Hoy tú tienes la oportunidad de comenzar de nuevo, de crear oportunidades para otros, de bendecir muchas vidas con el gozo que Dios ha puesto en ti. No hagas de tu vida una tragedia, levántate y haz que tu luz brille con mucha intensidad. Aprovecha la oportunidad de vivir y tu suerte cambiará. Si buscas resultado extraordinarios en la vida hoy es el mejor día para escribirme.

Señor, enséñanos a atender tu Palabra y a ver la oportunidad que tu nos da de vivir para bendecir a otros. Amén.

En amor y liderazgo,

Pedro Sifontes

martes, 4 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



Obtenemos lo que pensamos

Recientemente inicié una serie de Cómo Obtener Relaciones Extraordinarias en la Vida y me gustaría poder compartirte algunos puntos durante las próximas semanas. Hay un libro del Dr. Archibald Hart, Hábitos Mentales, donde el comparte lo siguiente: “Nuestro cuerpo es siervo de la mente. Obedece las operaciones mentales, ya sean elegidas en forma deliberada o la que se expresan en forma automática. La enfermedad y la salud, al igual que las circunstancias están enraizadas en el pensamiento.”

Mucho de lo que nos pasa en la vida se debe a que no controlamos nuestros pensamientos, y al no poder hacerlo nuestras emociones, reacciones y acciones ganan terreno y nos llevan a un camino donde no queríamos llegar, inclusive a la muerte. Somos lo que pensamos y vamos a obtener lo que estamos pensando, permítame ilustrarlo a través de un artículo que apareció en la revista ”Muy Interesante” de Julio 2002, donde conoceremos el maravilloso poder de la mente.

“Un científico de Phoenix, Arizona, quería probar una teoría. Necesitaba un voluntario que llegase a las últimas consecuencias. Lo consiguió en una penitenciaria. Era un condenado a muerte que sería ejecutado en la penitenciaria de St. Louis en el estado de Missouri donde existe la pena de muerte ejecutada en la silla eléctrica.

Le propuso lo siguiente: él participaría en un experimento científico, en el cual sería hecho un pequeño corte en el pulso, lo suficiente para gotear su sangre. Tenía la probabilidad de sobrevivir; en caso contrario, fallecería con una muerte sin sufrimiento ni dolor.

El condenado aceptó, pues era preferible eso a morir en la silla eléctrica; además tenia una oportunidad de sobrevivir.

El condenado fue colocado en una cama alta, de hospital, y amarraron su cuerpo para que no pudiera moverse. Hicieron un pequeño corte en su pulso. Abajo de su pulso, fue colocada una pequeña vasija de aluminio. Se le dijo que oiría su sangre gotear en la vasija.

El corte fue superficial y no alcanzó ninguna arteria o vena, pero fue lo suficiente para que el sintiera que su pulso fue cortado. Sin que él supiera, debajo de la cama había un frasco de suero con una pequeña válvula. Al cortar el pulso, fue abierta la válvula del frasco para que él creyese que era su sangre la que caía en la vasija.

Cada 10 minutos el científico, sin que el condenado lo viera, cerraba un poco la válvula y el goteo disminuía. Mientras tanto el condenado creía que era su sangre la que estaba disminuyendo.

Con el pasar del tiempo fue perdiendo color, quedando cada vez más pálido. Cuando el científico cerró por completo la válvula, el condenado tuvo un paro cardíaco y murió, sin ni siquiera haber perdido una gota de sangre.

El científico consiguió probar que la mente humana cumple, al pie de la letra, todo lo que le es enviado, es aceptado por el individuo, sea positivo o negativo y que tal acción envuelve a todo el organismo, sea en la parte orgánica o psíquica”.

Quizás a usted esta historia le parece terrible, pero puede ser la historia de su vida. ¿Cómo son sus pensamientos? ¿Ha podido controlarlos? Quizás estas luchando y pensando: Si mi amigo dijera….Si mi esposo hiciera….Si mi esposa cambiara…Si tuviera un empleo….Si pudiera…son tantos los pensamientos que pasan por nuestra mente y a veces nos distinguimos la verdad de la mentira, lo cierto de lo equivocado, la mente graba y cumple lo que es enviado.

Elige hoy cambiar tu forma de pensar, tu puedes tomar responsabilidad por tu vida, puedes elegir tus pensamientos y filtrarlo a la luz de la palabra de Filipenses 4: 8 consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente o merezca elogio. (NVI).

Recuerda esto: No puedo cambiar a las personas, pero si puedo cambiar mi manera de pensar y reaccionar. Hoy tu puedes poner en orden tus pensamientos y sacar todo lo negativo, todo aquello que te daña, como el odio, el rencor, la amargura, la avaricia, el desamor, los celos, las envidias, el orgullo, el egoísmo, la lascivia, la codicia, la mentira, la derrota, el fracaso y tu sabes lo que esta dañando. El poder del Señor se perfecciona en la debilidad, nunca digas no puedes, porque también puedes pensar y llenarte de todo lo positivo, el amor, la paz, el gozo, la paciencia, la fe, la victoria, la fidelidad, la pureza, el éxito.

La historia que te conté del presidiario pudo haber tenido un final diferente, si él se hubiese aferrado a la verdad y no a la mentira de sus pensamientos. El obtuvo lo que pensó.
“Quien piensa en fracasar, ya fracasó antes de intentar”
“Quien piensa en ganar, lleva ya un paso adelante”

Deja de ser el promotor de tus fracasos, tú puedes lograr tus sueños. No espantes al éxito. Deja ya de hacerte la víctima. No busques dar lástima. Sé el protagonista de tu vida. Los planes que Dios tiene para ti son de bienestar. Conforme a tus pensamientos será hecho.

En amor y liderazgo,
Pedro Sifontes
Conferencista y Entrenador de Liderazgo y Coaching.

lunes, 3 de octubre de 2011

ACERCANDOME AL REY



¿A dónde corres?

Mi amigo cuenta la historia de algo que sucedió mientras su papá estaba cazando venados en los bosques de Oregon.

Con el rifle acunado en el hueco de sus brazos, su padre iba por un antiguo camino de leñadores casi borrado por la exuberante espesura. Caía la tarde y estaba pensando en regresar al campamento cuando oyó un ruido en los arbustos cerca de el. Antes de que tuviera oportunidad de levantar el rifle, un bultito castaño y blanco corrió hacia el a toda velocidad. Mi amigo se ríe cuando cuenta la historia.

“Todo sucedió tan rápido, que papá apenas tuvo tiempo de pensar. Miro hacia abajo y allí estaba un conejito castaño (en extremo agotado) acurrucado contra sus piernas entre sus botas. La cosita temblaba como una hoja, pero allí estaba sin moverse.

Esto era sumamente raro. Los conejos silvestres tienen miedo de la gente, y ni siquiera es fácil llega a ver alguno… mucho menos uno que venga y se siente en nuestros pies.

Mientras papá trataba de encontrarle explicación a aquello, otro actor entro en la escena: Más abajo en el camino una comadreja saltó al camino, cuando vio a mi padre (y a la que consideraba su presa, sentada a sus pies) el predador quedo congelado, el hocico jadeante, los ojos con un brillo rojo.

Entonces comprendió papá que había irrumpido en medio de un pequeño drama de vida y muerte en el bosque. El conejito, exhausto por la persecución, estaba a solo minutos de la muerte. Papá era su última esperanza de refugio. Olvidando su natural recelo y miedo, el animalito instintivamente se había pegado a el buscando protección de los afilados dientes de su implacable enemigo”.

El padre de mi amigo no lo decepcionó: alzó su rifle, apuntó y disparó al suelo justo debajo de la comadreja. El animal pareció saltar casi recto al aire un par de pies y entró disparado hacia el bosque de nuevo, a toda velocidad que sus patas se lo permitían.

Durante un rato el conejito no se movió. Siguió echadito allí, acurrucado entre los pies del hombre, en la tarde que caía poco a poco, mientras el le hablaba suavemente.

¿A dónde fue, chiquitín? No pienso que te molestará por un tiempo. Parece que esta noche te has librado de la trampa.
Pronto el conejito se fue saltando, alejándose de su protector para entrar en el bosque.

¿A dónde corres, querido, en momentos de necesidad?
¿A dónde corres cuando te persiguen predadores como los problemas, las preocupaciones y los temores?
¿Dónde te escondes cuando tu pasado te persigue como un lobo implacable, tratando de destruirte?
¿Dónde buscas protección cuando las comadrejas de la tentación, la corrupción y la maldad amenazan con vencerte?
¿A dónde te vuelves cuando tu energía se agota… cuando la debilidad te embarga y sientes que no puedes huir por mas tiempo?
¿Te vuelves a tu protector, Aquel que esta firme con los brazos abiertos, esperando porque vuelvas y te refugies en la seguridad de todo lo que Él es?

Salmos 18:2
Roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fuerte mío, en él confiaré; Escudo mío, y el cuerno de mi salud, mi refugio.
Salmos 91:4
Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus alas estarás seguro: Escudo y adarga es su verdad.
Salmos 9:9
Y será Dios refugio al pobre, Refugio para el tiempo de angustia.
Salmos 62:7
En Dios está mi salvación y mi gloria: En Dios está la roca de mi fortaleza, y mi refugio.
Salmos 139:7
¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia?
Si subiere a los cielos, allí estás Tú; y si en el seol hiciere mi estrado, he aquí, allí Tú estás. Si tomare las alas del alba y habitare en el extremo del mar, Aún allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra.