martes, 11 de enero de 2022

O CREO EN EL ESPÍRITU SANTO ¿Y TU?

 


O CREO EN EL ESPÍRITU SANTO ¿Y TU?

Voy a compartir contigo unas breves líneas sobre mi forma favorita de orar. Le pido a Dios que estas líneas te inspiren a fortalecer tu vida de oración.Yo siempre he creído que no hay nada más poderoso en este mundo que hablar con Dios. Y para ello he llegado a la conclusión que la verdadera oración es la oración en el Espíritu. Eso significa: la oración que el Espíritu Santo inspira y dirige.De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. (Romanos 8:26)Cuando estoy conversando con Dios, me gusta hablar con el Espíritu Santo, y la razón es que cuando llegamos a la presencia de Dios, debemos reconocer nuestra debilidad y nuestra ignorancia en cómo debemos orar por nuestras necesidades. Muchas veces, le pido al Señor que me ayude en mi fe, y comienzo por testificarme a mí mismo las cosas que Dios ha hecho en mi vida. Y mientras hago esto, el Espíritu Santo me va recordando las maravillas del Señor; eso me lleva a dos cosas:1. Alabarlo por lo bueno que ha sido conmigo y a2. Darle gracias desde lo profundo de mi ser.Hay veces que solo quiero alabarlo con mis manos, con mi voz, y quiero adorarlo con mis lagrimas. En esos momentos, no lo apuro, no estoy ansioso de leerle mi lista de peticiones. Quiero disfrutar esa bella conexión entre mi espíritu y su Espíritu.Lo importe de la oración en el Espíritu es la relación, no tanto lo mucho que se diga o se haga, sino el decirlo o hacerlo con calma, con sinceridad, sin disimulos, sin pretensiones, solo con el deseo de un hijo reconocer el valor de su hermoso Padre.Al pedirle algo a Dios, seamos específicos, porque aunque Dios nos lo va a conceder de la mejor forma que nos conviene y no necesariamente como se lo estamos pidiendo, la Biblia dice "pedid y se os dará". Y también nos dice que no recibimos porque "pedimos mal". Así que Dios en toda su sabiduría nos dice por algún motivo importante que "pidamos".Al pedir en forma especifica, luego sabremos cuando nuestra oración ha sido contestada y le daremos toda la gloria y honra que Él merece.No debemos de hacer oraciones genéricas, solo repitiendo lo mismo una y otra vez. No debemos callarnos y decir "bueno ya Dios sabe". Debemos orar con tranquilidad, pidiendo al Espíritu Santo que nos guíe en nuestras oraciones, y que nos ayude en nuestra fe.Pablo Román Caballero

No hay comentarios:

Publicar un comentario