Un Secreto de Cómo alcanzar Misericordia de Dios

 Un Secreto de Cómo alcanzar Misericordia de Dios

Bienaventurados los misericordiosos,
porque alcanzarán misericordia. (Mateo 5:7)

Dios ha sido misericordioso con nosotros y Dios quiere que nosotros actuemos de la misma manera con otras personas. El encontrar a alguien con quien ser misericordioso es tremenda oportunidad para nosotros, porque es la forma de ganar misericordia para nuestras vidas. Muchas personas desconocen esto y actúan como quien hace un favor y se pierden la bendición por proceder así.

Misericordia es tener compasión por alguien aunque esta no lo merezca.

En otras palabras, misericordias son favores no merecidos. Cuando nosotros damos muestra de amor por otras vidas aunque no se lo hayan ganado, estamos siendo misericordiosos. Esto hace Dios con nosotros. Pensemos por un momento. Realmente ¿merecemos nosotros los favores que nuestro Padre Celestial nos hace? ¿Nos los hemos ganado por lo bueno que somos?

En Míqueas 6:8, Dios habla a través del profeta para darnos tres grandes instrucciones de vida: ¿Y qué es lo que demanda el Señor de ti, sino solo (1) practicar la justicia, (2) amar la misericordia, y (3) andar humildemente con tu Dios?

Dios dice que si quieres un resumen de lo que es la vida, y si vas a estar en su familia, esto es lo que se requiere de ti: necesitas ser justo con los demás, amar ser misericordioso con los demás y vivir humildemente en comunión con Dios.

(1) No hagas cosas injustas para salirte con la tuya. Haz lo correcto aunque la otra persona no se de cuenta o no sea tan astuta como tú.

(2) Disfruta el tener compasión de otros sin importar si ellos lo merecen o no.

(3) No te sientas más grande ni importante que otras personas, reconoce siempre que tú necesitas de Dios para triunfar en la vida.

La Biblia nos dice que no podemos recibir lo que no estamos dispuestos a dar.

Santiago 2:13 dice: Porque Dios no tendrá compasión de quienes no se compadecieron de otros. Pero los que tuvieron compasión de otros, saldrán bien del juicio.

Esto es a lo que se refiere la Biblia con acumular tesoros en el cielo. Si las personas entendieran que con sus acciones pueden ganar tanto en el cielo, todos tendríamos grandes tesoros celestiales.

Cuando tengas misericordia por alguien solo recuerda que Dios tendrá misericordia contigo. No busque que la persona te pague igual o te lo agradezca. Dios te lo pagará teniendo misericordia de ti.

Mostrar misericordia trae felicidad. La Biblia enseña una y otra vez que cuanto más misericordioso somos, más felices vamos a ser.

Ser misericordioso con otras personas, sin humillarlas, sin hacerles sentir mal por la ayuda o perdón que le damos, en realidad nos bendice y nos hace más felices. Y la misericordia ciertamente produce mayor gozo en quien la da que en quien la recibe.